El presidente decretó el miércoles el aumento de la gasolina más barata del mundo, por primera vez en casi 20 años, y devaluó el bolívar buscando hacerle frente a la grave crisis económica que azota al país miembro de la OPEP.
Caracas. El aumento de los precios de los combustibles en Venezuela, que entró en vigencia en la víspera, no incluye al diésel, vital para el transporte de carga y de pasajeros, dijo el sábado el presidente Nicolás Maduro.
El presidente decretó el miércoles el aumento de la gasolina más barata del mundo, por primera vez en casi 20 años, y devaluó el bolívar buscando hacerle frente a la grave crisis económica que azota al país miembro de la OPEP.
"Yo decidí dejar el diésel como está: no tocar el diésel para que no hubiera ningún problema en el transporte de carga, ni transporte público", dijo Maduro la noche del sábado.
El mandatario socialista explicó que la mayoría de vehículos de transporte de carga y pasajeros que circulan en el país usan diésel. En Venezuela, un litro de diésel cuesta 0,048 bolívares ó 0,0048 centavos de dólar al tipo de cambio más fuerte.
A pesar de que el mandatario, un ex chofer de autobús de 53 años, aseguró que el aumento le permitirá al Estado ahorrarse casi 1.000 millones de dólares anuales en importación de aditivos, analistas dicen que es insuficiente ya que no llega a cubrir los costos de producción de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
Además, muchos sostienen que el incremento de los precios de la gasolina sólo echaría más fuego a la inflación, que el año pasado cerró en 180,9 por ciento, la más alta del mundo.
Tras el aumento, la gasolina de 91 octanos quedó en 1 bolívar por litro (0.1 dólares) y la de 95 octanos en 6 bolívares por litro (0.6 dólares) y, según Maduro, sigue siendo la "más barata del mundo".
A pesar de ello, el mandatario pidió a los venezolanos surtir sus vehículos con gasolina de 91 octanos en vez de 95 octanos, ya que esta última es más costosa de producir para PDVSA.