Este lunes, el presidente Evo Morales inauguró el ducto que transportará 50 millones de pies cubicos de gas para asegurar el funcionamiento de la planta de Amoníaco y Urea en Cochabamba.
El presidente ejecutivo de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Generales (YPFB), Guillermo Achá, proyectó para el país un ingreso mayor a los US$2.000 millones en los próximos 20 años por la exportación de urea como fertilizante.
Este lunes, el presidente Evo Morales inauguró el ducto que transportará 50 millones de pies cubicos de gas para asegurar el funcionamiento de la planta de Amoníaco y Urea en Cochabamba.
"Tendremos unos ingresos adicionales por los próximos 20 años comercialización por encima de los US$2.000 millones; es algo importante porque beneficia a la economía y a la población boliviana porque tendrá a disposición fertilizantes dentro de nuestras fronteras", destacó Achá, en conversación con la estatal Patria Nueva.
La ejecución del proyecto tiene un avance físico del 95%, según informó Achá. La planta tendrá capacidad para procesar 700 mil toneladas de urea por año y se pretende que el 80% de la producción sea exportado a mercados de Brasil y Argentina. Achá también destacó que el funcionamiento de la planta generará 500 empleos directos y 4.000 de manera indirecta.
Según el Presidente Ejecutivo de YPFB, la planta operará con un total de 1,2 millones de pies cúbicos de gas por día, por lo que a los 50 millones de pies cúbicos que recibirán se añadirán otros 60 millones.
Explicó que actualmente el sector agrícola del país recurre a fertilizantes imporatados, por lo que la producción de urea plantea mejore condiciones de producción. Otros mercados para su exportación serán Paraguay y Uruguay.