"Es un mercado gigantesco. Porque uno está hablando desde vidrios polarizados a pinturas personalizadas, ruedas, sonido, equipos de desarrollo, sistema de frenos", declaró el empresario Fernando Batista, uno de los organizadores de la feria AutoEsporte ExpoShow, que finalizó en Sao Paulo.

Sao Paulo. El mercado de personalización de automóviles en Brasil mueve anualmente unos 8.000 millones de reales (unos 3.175 millones de dólares) y da señales de crecimiento, concluyeron hoy los organizadores de la feria AutoEsporte ExpoShow, que finalizó en Sao Paulo.

"Es un mercado gigantesco. Porque uno está hablando desde vidrios polarizados a pinturas personalizadas, ruedas, sonido, equipos de desarrollo, sistema de frenos. Es infinito. Uno puede personalizar de varias formas y hay para todos los bolsillos", declaró a medios el empresario Fernando Batista, uno de los organizadores.

La primera edición de la feria AutoEsporte ExpoShow, realizada entre el 21 y 24 de noviembre en 30.000 metros cuadrados del centro de exposiciones Anhembí, el principal de la mayor ciudad brasileña, contó con cien expositores y recibió unos 35.000 visitantes.

Las atracciones pasaron desde automóviles clásicos hasta los versátiles deportivos, pasando por algunas invenciones de inquietos y creativos brasileños y réplicas de vehículos del cine, como el Batimóvil o el de la película 'Volver al futuro'.

Las empresas de accesorios también expusieron las novedades del mercado, principalmente las tecnológicas para ser adaptadas al gusto personal de los dueños de coches.

La feria, además, cerró con broche de oro un mes del mundo automotor en la ciudad, que recibió hasta el 9 de noviembre el Salón del Automóvil de Sao Paulo, el principal de su género en América Latina, y el Gran Premio de Brasil, penúltima carrera del campeonato mundial de automovilismo en Fórmula Uno.

Automóviles más altos o más bajos, pintados o adhesivados y con las más variadas características: máquina para hacer palomitas de maíz y proyectar películas, suspensiones saltarinas o potentes equipos de sonido, deleitaron a los amantes de los automóviles personalizados en Brasil.

La red de restaurantes en carreteras Graal presentó la réplica del coche de la película 'Volver al futuro', que cumplió con todas las exigencias de Universal Studio para reproducir los detalles internos y externos proyectados por el 'Dr.Brown' en el filme.

Para el mundo real, el Delorean DMC-12 fue desarrollado en la ciudad paulista de Votorantim por la empresa brasileña The One Performance.

Otra de las muchas novedades presentadas fue el 'Nanico' ('bajito' en portugués), creado por el diseñador Caio Strumiello, con 1,90 metros de longitud, autonomía de 30 kilómetros por cada litro de gasolina y que se produce "artesanalmente" con precios entre 15.000 y 18.000 reales (entre unos 5.954 y 7.145 dólares).

El pequeño coche, que alcanza velocidades de hasta 80 kilómetros por hora, puede tener una versión eléctrica que está siendo desarrollada por su creador y una empresa asociada, para llegar al mercado con un precio de 20.000 reales (unos 7.939 dólares).