El Estado mexicano logró una adjudicación de 66% de las 29 áreas concursadas y mejoró su ganancia respecto de la Ronda 1.4. También comprometió la perforación de 23 pozos exploratorios en el Golfo de México.
Ciudad de México. La cuarta licitación de la Ronda 2 obtuvo compromisos de inversiones de US$93.000 millones a lo largo de los 50 años de la vida de los 19 contratos adjudicados en caso de que éstos tengan éxito comercial, inversión que es 1,5 veces la acumulada a lo largo de todas las rondas licitatorias anteriores.
En el concurso se obtuvieron también US$525 millones en bonos en efectivo por parte de los ganadores —11 consorcios y ocho individuales, de 10 países— que deberán ser entregados al Fondo Mexicano del Petróleo antes de la firma de los contratos.
Se comprometió también la perforación de 23 pozos exploratorios en la parte mexicana del Golfo de México, actividades que costarán alrededor de US$100 millones cada uno.
A pesar de que esta licitación tuvo una tasa de éxito inferior a casi todas las anteriores, ya que fue de 66% con 19 de los 29 bloques a concurso adjudicados, cuando la Ronda para recursos similares 1,4 tuvo 80% de éxito en la adjudicación y ocho de 10 bloques adjudicados, si todos los bloques que entrarán en operación tienen éxito, podrían agregar a la plataforma de producción petrolera mexicana nada menos que 1.5 millones de barriles de petróleo y 4.000 millones de pies cúbicos de gas en el 2032, aunque la producción arrancará hasta el 2028.
“Los resultados son una expresión clara de confianza en el corto y mediano plazo en el sector energético y los recursos del país”, dijo Aldo Flores, subsecretario de Hidrocarburos, “el aumento en los precios del petróleo no influye de manera determinante en la decisión de las empresas de apostar en México porque no es el que se verá cuando arranque la producción, son en todo caso las cuencas prometedoras que se pusieron a concurso”.
Regalía de 64,7%. En el promedio entre todas las ofertas presentadas de regalía adicional como criterio de adjudicación, a lo que se suman otros componentes impositivos como los impuestos sobre la Renta, regalías básicas y cuotas exploratorias y estatales, resultó que 64,7% de las utilidades que se obtengan en la explotación de estos bloques será captado por el Estado mexicano.
Si se añaden los ajustes hasta donde pueden llegar estos impuestos con éxitos exploratorios inesperados o altos precios petroleros, el government take se elevaría hasta 67,2% de las utilidades.
En contraste, en la Ronda 1.4 la regalía para el Estado se quedó en 59,8% de las utilidades para el Estado, mientras que en Estados Unidos este government take es de alrededor de 50% en bloques de este tipo, aseguró el director de la Unidad de Ingresos sobre Hidrocarburos de la Secretaría de Hacienda.
“Competimos con el mundo entero y quienes participan evalúan a todos los campos disponibles en todo el mundo, al invertir en México están dejando de hacerlo en otros lugares”, dijo Juan Carlos Zepeda, presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Inversión captada asciende a US$153.000. Hasta el momento, en siete rondas licitatorias anteriores el gobierno mexicano había sumado poco más de US$60.000 millones comprometidos en inversiones a lo largo de la vida de los contratos de los cuales 41.000 millones fueron sólo de la Ronda 1.4.
Con estos resultados, se alcanzan compromisos de inversiones de US$153.000 millones en caso de que exista éxito comercial en los bloques adjudicados en todas las rondas, expuso el presidente del regulador petrolero mexicano.
Con esta licitación se suman dos empresas más a la operación petrolera mexicana, que en total tendrá 68 nuevas firmas, de las cuales 33 son mexicanas, una vez firmados los contratos.
En lo que respecta a los riesgos económicos de cancelación de las firmas de los contratos, dados los montos tan altos de inversiones, Juan Carlos Zepeda explicó que existen tres garantías que amparan al Estado mexicano: desde la adjudicación hasta la firma del contrato la CNH cuenta con una carta de crédito como garantía de seriedad por US$3 millones que se cobrará al ganador que no cumpla con su compromiso. Las bases del concurso determinan que el segundo lugar podrá quedarse con el contrato y, si existió compromiso de inversión en efectivo, deberá otorgarlo igualmente al Fondo Mexicano del Petróleo.
En la firma del contrato se entregan también diversas cartas de crédito que corresponden a la garantía de cumplimiento y equivalen al compromiso mínimo de trabajo, en caso de que los ganadores firmen y después renuncien al contrato.
Finalmente, las empresas ganadoras tienen, todas, un capital contable mínimo de US$2.000 millones y tienen que ser respaldadas por una matriz que tenga mínimo US$5.000 millones, lo que obligó a que fueran empresas serias en el sector las que ganaron estos 19 contratos en aguas profundas.