Cifras de Thomson Reuters muestran que el valor de las fusiones y adquisiciones anunciadas en México llegó a US$8.640 millones, sobre los US$8.510 millones en Brasil.
Sao Paulo. Las compañías mexicanas están llenando este año el vacío dejado por Brasil, la mayor economía latinoamericana, atrayendo una mayor inversión en fusiones, adquisiciones, bonos y ofertas de acciones.
Varios negocios se han anunciado desde que México colocó bonos soberanos por US$2.000 millones en enero, porque los inversores tratan de beneficiarse del impacto del crecimiento de Estados Unidos en su vecino del sur.
Así, la actividad de operaciones empresariales durante el primer trimestre del año fue mayor en México que en cualquier otro lugar de América Latina, por segunda vez en una década.
Cifras de Thomson Reuters muestran que el valor de las fusiones y adquisiciones anunciadas en México llegó a US$8.640 millones, sobre los US$8.510 millones en Brasil.
En una muestra de cómo han cambiado las cosas, el año pasado las fusiones y adquisiciones en Brasil sumaron en los tres primeros meses del año US$13.930 millones, frente a US$3.990 millones en México.
Banqueros esperan que la tendencia se repita en colocaciones de acciones, como las ofertas públicas iniciales (OPI).
Brasil atraviesa momentos turbulentos porque una desaceleración de la economía y una investigación por corrupción a la petrolera estatal Petrobras han deteriorado la confianza empresarial y la actividad en los mercados de capitales.
"México sigue siendo la preferida de la región", dijo la semana pasada Ignacio Benito, director gerente de mercados de capitales y fusiones y adquisiciones de JPMorgan Chase & Co.
"Puede aparecer cualquier asunto que perjudique a la confianza, pero con un buen desempeño de la economía de Estados Unidos es difícil que México no se beneficie", agregó.
Si bien la economía mexicana ha tenido consistentemente un desempeño bajo el promedio de la región en la última década, se espera que crezca más de un 3% este año y las reformas en telecomunicaciones y energía han alentado adquisiciones, como la compra del Grupo Iusacell SAB por parte de AT&T Inc.
En contraste, los negocios en los mercados de capitales de Brasil, Colombia y Chile están tomando más tiempo en cerrarse porque una baja de los precios de las materias primas y la debilidad de las monedas hace más difícil calcular los retornos futuros, dijo Facundo Vázquez, jefe de mercados de capitales de Itaú BBA.
Si bien México no es inmune, en estos momentos se ve más resistente que sus pares latinoamericanos.
"En términos generales, si quieres cerrar un negocio en México, puedes hacerlo", dijo Mark Rosen, jefe de banca de inversión para América Latina de Bank of America Merrill Lynch, en una entrevista en Nueva York.