Sólo por importación de gasolinas automotrices, que durante el semestre promediaron 70% del consumo nacional en volumen, el monto de las compras al exterior se elevó a US$8.887 millones, con un aumento de 36% en un año.
Ciudad de México. Durante el primer semestre del año, el valor de las importaciones mexicanas de productos petroleros se elevó 36% a US$25.506 millones, con lo que alcanzó un nuevo récord, impulsadas principalmente por la compra de petrolíferos y gas natural, de acuerdo con cifras del Banco de México.
Tan sólo por importación de gasolinas automotrices, que durante el semestre promediaron 70% del consumo nacional en volumen, el monto de las compras al exterior se elevó a US$8.887 millones, con un aumento de 36% en un año.
Sin embargo, el valor de las exportaciones de petróleo crudo ascendió a US$13.023 millones, con lo que regresó a sus niveles del 2014 antes de la caída de los precios internacionales.
Con ello, el déficit comercial entre exportaciones de productos petroleros e importaciones de combustibles ascendió a US$10.286 millones en la primera mitad del año, cifra superior al nivel récord previo de US$8.198 millones que reportó el Banco de México en el mismo lapso del 2018.
Dependencia del exterior. En todos los combustibles derivados del petróleo que se importan hubo aumentos en el valor de las importaciones. Si bien destaca que las gasolinas automotrices ya abarcan la tercera parte del monto de estas importaciones, las erogaciones del resto de los combustibles sufrieron también importantes aumentos.
Por ejemplo, las importaciones de gas natural ascendieron a un desembolso de US$3.414 millones en el semestre, con un incremento de 48% de un año a otro, mismo que continuará, ya que a más tardar en el 2020 quedará lista la red de importaciones que apalancada a la operación de la Comisión Federal de Electricidad fue proyectada para hacer crecer en 80% el sistema nacional de gasoductos desde el 2012.
El mayor incremento en el monto de compras al exterior fue de la turbosina, que pasó de US$468 millones a US$858 millones entre el primer semestre del 2017 y el mismo periodo de este año. Ello implica un aumento de nada menos que 78% en el valor de las importaciones de este combustible, mismo que refleja la caída de la producción de Petróleos Mexicanos de este combustible.
El valor de las importaciones de diesel aumentó 56% de un año a otro, sumando US$4.529 millones en la primera mitad del 2018. Esta erogación ya representa 68% del desembolso que se realizó en todo el 2017.
Incluso las importaciones de combustóleo —que según distintos anuncios de política energética sería considerado un producto en desuso por sus altos niveles de emisiones contaminantes— también presentaron un alza, de 68% de un año a otro, con lo que en la primera mitad del año se ubicaron en US$439 millones.