Aunque las exportaciones mexicanas de los productos petroquímicos se incrementaron en 12% entre un año y otro, las importaciones aumentaron en la misma proporción, lo que arrojó un saldo negativo de US$16.084 millones.
Ciudad de México. El saldo negativo en la balanza de comercio exterior de derivados de petroquímicos en el país se profundizó en 12% entre un año y otro al concluir el 2017, luego de que se importaron productos por un valor de US$21.498 millones, con un incremento de US$2.362 millones entre un año y otro, reveló el Banco de México.
Si bien las exportaciones mexicanas de estos productos se incrementaron también en 12% entre un año y otro, el valor de éstas, por US$5.414 millones —US$588 millones más que en el 2016—, las importaciones aumentaron en la misma proporción, lo que arrojó un saldo negativo de US$16.084 millones.
Lo anterior significa que por cada dólar que entró al país por exportación de productos terminados derivados de petroquímicos, se gastaron US$3,9 en importaciones. El saldo negativo en la balanza fue prácticamente el peor de la década, sólo detrás del que se obtuvo en el 2014, que alcanzó los US$16.529 millones negativos, cuando el precio del petróleo precursor de estos productos fue de casi US$100 por barril.
Las importaciones tanto de químicos como de plásticos impulsaron el alza en las compras totales al exterior. Por ejemplo, el valor de las importaciones de productos químicos se elevó en 12,5% entre un año y otro alcanzando US$5.948 millones que representaron 27% del valor de las importaciones totales de derivados de petroquímicos.
En tanto, las importaciones de plásticos tuvieron un incremento anual de 11,8%, con lo que se erogaron US$511 millones más para llegar a un total de US$4.857 millones al cierre del 2017. En cuanto a los textiles, su importación se elevó en 6,8% en comparación con el 2016, para alcanzar US$636 millones.
Accidente en Petroquímica de Pajaritos dispara importaciones. La falta de infraestructura y disponibilidad de materia prima para elaboración de petroquímicos son el principal motivo por el cual estas importaciones se disparan año con año, reitera la Asociación Nacional de la Industria Química (ANIQ), ya que hace 20 años eran 346% inferiores a las que se observan hoy con un saldo negativo en la balanza inferior a US$2.500 millones, siete veces menor al que se obtuvo el año pasado.
Las producción de precursores petroquímicos de Petróleos Mexicanos (Pemex) cayó 21,5% en un año al ubicarse en 4,2 millones de toneladas de productos en el 2017, además de que se ha desplomado 43% en la última década y es 63% inferior a la que se reportaba hace 20 años.
La explosión en la conversión entre Pemex y Mexichem en la empresa Petroquímica Mexicana de Vinilo, en Pajaritos, Veracruz, a inicios del 2016, provocó a su vez que las importaciones de cloruro de vinilo se incrementaran 24% en un año, llegando a 393.000 toneladas de estos productos traídos del exterior. A finales del año pasado, Mexichem anunció que no reconstruirá la planta Clorados III y que con ello deja el negocio de VCM y etileno en México.
El único producto en el que descendieron las importaciones fue el polímero de etileno, del cual se importaron 1,8 millones de toneladas —que fueron 247.000 toneladas menos que el año anterior— gracias a la puesta en marcha del complejo de Braskem Idesa, Etileno XXI.