El plan de US$4.800 millones está detenido desde noviembre tras una ola de protestas que dejaron varios heridos en la norteña región de Cajamarca y que generaron la primera crisis del gobierno del presidente Ollanta Humala.
Lima. Las empresas Newmont y Buenaventura responderán en "los próximos días" a las recomendaciones de expertos para que modifiquen su proyecto peruano de oro y cobre Minas Conga, paralizado por el rechazo de pobladores que temen que afecte sus fuentes de agua, dijo este lunes uno de los socios del emprendimiento.
El plan de US$4.800 millones está detenido desde noviembre tras una ola de protestas que dejaron varios heridos en la norteña región de Cajamarca y que generaron la primera crisis del gobierno del presidente Ollanta Humala.
En un intento por aplacar las protestas, el gobierno peruano contrató a peritos que evaluaron parte del estudio de impacto ambiental del proyecto, tras lo cual recomendaron mantener dos de cuatro lagunas que serían afectadas y elevar la capacidad de los reservorios de agua previstos.
"La empresa tiene que evaluar las recomendación de los peritos y en ese proceso se está", dijo el presidente ejecutivo de la minera peruana Buenaventura, Roque Benavides, durante un simposio mundial del oro que se realiza en Lima.
El ejecutivo detalló que un equipo conformado por funcionarios de las firmas Fluor, Yanacocha, la estadounidense Newmont y Buenaventura están evaluando las recomendaciones de los peritos.
"Esperamos poder hacer un planteamiento en los próximos días, ciertamente no es una decisión fácil, es un proyecto difícil", agregó.
Humala ha pedido a las empresas que cumplan con la propuestas de los peritos para que pueda avanzar el emprendimiento, que de concretarse se convertiría en la mayor inversión del sector minero en la historia de Perú.
El presidente ejecutivo de Newmont, Richard O'Brien, expresó recientemente su interés en seguir adelante con Minas Conga, aunque advirtió que destinará sus inversiones a otros países si los cambios propuestos hacen que el proyecto no sea rentable.
Los pobladores de Cajamarca rechazan Conga -que produciría entre 580.000 y 680.000 onzas de oro anuales- por temor a que su desarrollo afecte las fuentes naturales de agua de la zona, que vive principalmente de la agricultura y ganadería.
Newmont afirma que su estudio ambiental, aprobado en el 2010 por el anterior gobierno, cumple con los más altos estándares pues planea almacenar agua de las lagunas de la zona en tres reservorios para tener agua potable todo el año.
Las empresas planifican trasvasar el agua de cuatro lagunas -Mala, Chica, Azul y Perol- hacia tres reservorios que se construirán cerca del lugar de origen de las mismas.
Asimismo, tienen previsto depositar la roca removida sobre la laguna Azul.
Humala pidió a las mineras garantizar el agua en la zona de influencia del proyecto al menos cuadruplicando la capacidad de almacenamiento propuesta en el proyecto para beneficiar a más pobladores cajamarquinos.
Perú posee vastos recursos mineros -es el segundo productor mundial de cobre y el sexto de oro-, pero la extracción suele toparse con el rechazo de pobladores que temen daños ambientales o piden una mayor tajada de los ingresos del sector.
Los conflictos, que suman más de 200 en todo el país, amenazan con frenar más proyectos mineros por unos US$53.000 millones de dólares previstos para los próximos años.