Según informó Empresas Públicas de Medellín (EPM) en un comunicado, el crédito fue cancelado en su totalidad al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con recursos disponibles en la caja de la empresa.
Empresas Públicas de Medellín (EPM) le informó a la Superfinanciera que, en cumplimiento con el acuerdo de pago anticipado voluntario con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), pagó el saldo total a capital del crédito por US$450 millones, que adquirió para la construcción de Hidroituango.
Según mencionó EPM en un comunicado publicado en la Superfinanciera, el crédito fue cancelado en su totalidad, con recursos disponibles en la caja de la empresa. Además, “se mantiene un nivel positivo de liquidez, sin afectar la operación y la continuidad de las inversiones requeridas tanto por el proyecto hidroeléctrico Ituango, como por los otros proyectos que actualmente se desarrollan”.
El préstamo fue firmado el 29 de diciembre de 2017 por un monto hasta de US$900 millones, de los cuales desembolsaron US$450 millones. Ambas entidades firmaron un otrosí (Amendment) al contrato de crédito que establecía una serie de hitos sobre el avance de las obras.
Pero ante la incertidumbre generada por los efectos del fallo de segunda instancia por parte de la Contraloría General de la República, en relación con el cumplimiento de los próximos hitos establecidos en el Amendment del contrato de crédito, el BID y EPM acordaron acordaron pagar de manera anticipada
“Esta operación de pago voluntario anticipado se desarrolló en atención a la prioridad que le brinda EPM a honrar todas sus obligaciones financieras, a su capacidad financiera y a la preservación integral de la relación de largo plazo de las dos instituciones”, aseguró EPM.
Vale la pena recordar que EPM y CCC Ituango, el consorcio constructor de Hidroituango, llegaron a un acuerdo para prorrogar el contrato por ocho meses. Lo que implica extenderlo hasta agosto de 2022 y tras los ocho meses habrá un periodo de tres meses de empalme con un constructor nuevo.
Así las cosas, las nuevas fechas establecen que para junio y noviembre del próximo año tienen que entrar en funcionamiento las primeras dos unidades de generación de energía.