El CEO de AméricaEconomía, Elías Selman, apunta a que el IV Foro Multilatinas, a celebrarse en Ciudad de México, este 21 y 22 de octubre, refuerce la convicción de la importancia de la globalización y regionalización de las empresas latinoamericanas.
Ya han pasado más de tres años desde que se celebró la primera versión del Foro Multilatinas, en Santiago de Chile, y Elías Selman, fundador de la iniciativa y CEO de AméricaEconomía, ve con gran satisfacción cómo la cuarta versión del Foro, “Mirando al Pacífico”, está pronto a celebrarse este 21 y 22 de octubre en Ciudad de México. Para esta versión, Selman afirma que las multilatinas, si bien enfrentan un escenario de una importante desaceleración económica en la región, deben mantener su convicción en la importancia de la internacionalización y regionalización de sus operaciones.
-¿Cuáles son las principales novedades de esta versión del Foro Multilatinas?
-La idea es que los foros cada año tenga una visión o temática tremendamente relevante y que concite el interés de las multilatinas, ya que éstas no están en el limbo, sino en un escenario de una coyuntura económica global regional. Y el escenario va cambiando, en un año pasan muchas cosas.
Este año el Foro lleva el nombre de “Mirando al Pacífico” porque claramente destacan las multilatinas que están de cara al Pacífico. Las multilatinas de México, Colombia, Perú y Chile están destacando, en contraste con las del Atlántico. Brasil, por supuesto que tiene muchas multilatinas, pero cuando uno las mide por PIB, pierden presencia. Destacan, por ejemplo, Chile, que siendo un país muy pequeño, tiene muchas multilatinas. Argentina no tiene muchas, Venezuela tiene a Pdvsa, aunque con todos los problemas que enfrenta su economía… entonces, este es un fenómeno interesante que vamos a cubrir en esta coyuntura.
-¿Qué papel tiene China en este Foro?
-Ése es otro punto muy importante a tocar, porque queremos analizar cómo este nuevo jugador que está en América Latina, y que compite económica y geopolíticamente con EE.UU en nuestra región, puede impactar en los negocios latinoamericanos y qué desafíos implica el bloque chino al fenómeno de las multilatinas.
-El Foro ya se ha celebrado en Chile, Colombia y Panamá. ¿Qué factor llevó a que esta versión se hiciera en México?
-Hemos elegido México porque hay un nuevo gobierno, con gran brío, entusiasmo y fuerza que ha impulsado la agenda reformista, como la llaman, posibilitando que llegue capital extranjero a Pemex; la realización de desregulaciones en el mercado de las telecomunicaciones, impulsando una agenda de descartelización o desmonopolización, una materia que también vamos a tener en el Foro y que se hace relevante porque el foro es justamente allí. Tampoco puedo dejar pasar, en cuanto a la razón por la que elegimos a México, algo muy relevante: que es el único país de la región con una estructura industrial. Y cuando hablo de una estructura industrial, hablo de una estructura industrial competitiva, que tiene que ver con su inserción geográfica, con su presencia en el Nafta, etc.
Entonces, todos los elementos que te he mencionado están haciendo devenir al foro de las multilatinas en el foro de la economía latinoamericana. Ahora bien, el desarrollo de las multilatinas va muy de la mano de la coyuntura de la realidad económica y política de la región, y estamos naturalmente cubriendo todos esos temas, y en algún sentido te puedo decir que hemos ido aprendiendo, al llegar a esta cuarta versión, a incluir los aspectos de la coyuntura políticos y económicos de la región y del mundo.
-A propósito de la coyuntura económica, ¿usted es de los que piensan que el actual escenario de desaceleración económica que enfrenta la región afecta los futuros planes de las multilatinas?
-Veo que aparecen muchas propuestas en el ámbito político, en este actual escenario de desaceleración, que apuntan a bueno, no sirvió el modelo de desarrollo, olvidémonos de la globalización y volvamos a los mercados internos. Así las cosas, si bien hay muchas correcciones que hacerle al actual modelo, la globalización e internacionalización de las economías y sus empresas ciertamente es una parte importante de nuestra realidad que no debiéramos abandonar.
-Pero ciertamente hay un proceso de menor impulso económico que afecta a la región y que ha sido advertido por distintos organismo internacionales.
-Los ciclos económicos se han acortado brutalmente, por tanto, podría el ciclo de las materias primas revertirse. Ahora, lo que también debemos aprender es que la volatilidad y la incertidumbre llegaron para quedarse, eso no va a cambiar; además cuesta mucho predecir el futuro, incluso la tecnología puede producir cambios tremendos en muy breves lapsos. Ahora bien, dicho lo anterior, en realidad, a mí lo que realmente me preocupa es Brasil.
-¿Por su menor crecimiento?
-Brasil es el motor de América Latina y nos preocupa que está bastante estancado y vemos que las recetas que ocupa el gobierno no son buenas. Ya sabemos a dónde conduce esta maraña de tratar de manejar la coyuntura sin pensar en el mediano y largo plazo… tenemos muchos miedos y tratamos de impedir que los mercados funcionen. Nosotros creemos –y aquí entramos al plano de la política- que los mercados deben funcionar. También pensamos que el mercado no soluciona todo, y por cierto necesitamos un Estado fuerte que se haga cargo de problemas de salud, equidad, inclusión social, pero no un Estado que impida los funcionamientos de los mercados y que signifique desacelerar el crecimiento para bajar sus índices y luego dar a paso las recesiones. En suma, buscamos un Estado limpio, que regule lo que haya que regular y desregule lo que se deba desregular.
-Finalmente, ¿cree que hay multilatinas para rato y, por ende, Foro Multilatinas también en el largo plazo?
-Yo pienso y espero que sí, aunque nada está garantizado porque las cosas dependen de decisiones individuales, contextos políticos… Ahora bien, yo espero y creo que América Latina, muchos de los países de la región, están en la dirección correcta, en particular los de la Alianza del Pacifico, un mercado de 200 millones de personas. Y ya hay varios países interesados del mundo en ingresar a la Alianza… Yo soy optimista, por naturaleza.
