Los inversionistas están buscando pruebas de que la mayor compañía de alimentos envasados del mundo puede mejorar su desempeño bajo el mando de su nuevo presidente ejecutivo, Mark Schneider.
Zúrich/Londres. Nestlé, que está bajo la presión del inversor activista Third Point, fijó este martes por primera vez un objetivo de margen operativo, aunque éste fue considerado conservador y no alcanzó las ambiciones de su rival Unilever.
Los inversionistas están buscando pruebas de que la mayor compañía de alimentos envasados del mundo puede mejorar su desempeño bajo el mando de su nuevo presidente ejecutivo, Mark Schneider, en momentos en que el sector de alimentos enfrenta un desafío por la irrupción de marcas más pequeñas y por un cambio en los gustos y hábitos de los consumidores.
El fabricante suizo de las barras de chocolate KitKat y del café Nespresso anunció que buscará un crecimiento orgánico que se ubique cerca de la mitad de una cifra única y un margen de utilidad operativa subyacente de 17,5% a 18,5% al 2020.
Nestlé, la mayor compañía europea, dijo que la cifra comparable de márgenes fue de 16% en 2016. Anteriormente la empresa se ha centrado más en fijar objetivos de crecimiento de ventas, pero Schneider dijo que era importante en esta etapa equilibrar ambos.
Schneider añadió que era poco probable que este nuevo objetivo fuera seguido por otro más alto en una etapa posterior.
Unilever, que este año rechazó una oferta de adquisición de US$143.000 millones de Kraft Heinz, fijó una meta de 20% para su margen de ganancia operativa subyacente en 2020.
Schneider asumió en enero como el primer presidente ejecutivo que proviene de fuera de Nestlé en casi un siglo. En junio, Third Point reveló una participación de 3.500 millones de dólares en Nestlé y solicitó una serie de acciones, incluyendo un objetivo de margen formal de 18 a 20 por ciento.