Debido a la escasez, centenares de neoyorquinos hacen colas en las gasolineras hasta tres horas, y en algunos puntos se han registrado desórdenes que la policía ha debido controlar.
En medio del creciente descontento por la escasez de gasolina en áreas afectadas por el huracán Sandy, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, autorizó la compra de millones de galones de gasolina.
Debido a la escasez, centenares de neoyorquinos hacen colas en las gasolineras hasta tres horas, y en algunos puntos se han registrado desórdenes que la policía ha debido controlar.
El suministro del combustible, tanto por oleoductos como por barcos, ha sido muy limitado. La súper tormenta causó daños en los puertos que reciben los barcos con gasolina e inundó los equipos subterráneos que la envían a través de tuberías, según la BBC.
Mientras tanto, Obama y su rival republicano, Mitt Romney, están entrando a la última fase de la campaña antes de las elecciones presidenciales del próximo martes.
Como los dos candidatos están cabeza a cabeza en las encuestas de opinión, se concentrarán en siete u ocho estados péndulo, entre ellos Ohio.
La cadena británica refirió que Obama parece haber logrado un impulso importante gracias a su manejo de la crisis por la súper tormenta.