La medida comenzaría a la medianoche de este martes en la nación austral, el principal exportador mundial de aceite y harina de soja, mientras los productores continúan con la recolección de una cosecha de 60 millones de toneladas del grano.

Buenos Aires. Trabajadores portuarios de los suburbios de Rosario, el principal centro agroexportador de Argentina, amenazaban el lunes con iniciar una huelga por reclamos salariales, en momentos en que los productores avanzan con la cosecha de la que sería una producción récord de soja.

La medida comenzaría a la medianoche en la nación austral, el principal exportador mundial de aceite y harina de soja, mientras los productores continúan con la recolección de una cosecha de 60 millones de toneladas del grano, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

"Si se produce el paro (huelga), afectará las operaciones de todas las terminales", dijo Guillermo Wade, gerente de la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas (CAPyM), haciendo referencia a los 22 puertos fluviales en las ciudades de San Lorenzo, Puerto General San Martín y Timbúes, ubicados unos 50 kilómetros al norte de la ciudad de Rosario.

Las medidas de fuerza en pedido de aumentos de sueldos son habituales en Argentina, en especial en el caso de la Confederación General del Trabajo (CGT) del distrito de San Lorenzo, debido al nivel de inflación cercano al 30 por ciento anual que golpea los bolsillos de los trabajadores.

La CGT San Lorenzo decidirá en la tarde del lunes si realiza la medida, en base a los resultados del diálogo con la cámara agroexportadora CIARA-CEC.

Mientras tanto, en la región agrícola núcleo de Argentina, agricultores destacan que los rendimientos de la soja 2014/15 han llegado a alcanzar las 6,5 toneladas por hectárea, frente a las 2,61 toneladas por hectárea promedio de los últimos 14 años, según la Bolsa de Cereales.

Por otro lado, lluvias fuertes en los últimos días en el centro y sur de la provincia de Buenos Aires provocaron excesos de humedad en campos y dificultaron el tránsito de algunos caminos.

"Las lluvias van a demorar la cosecha una semana al menos por falta de piso para el acceso de las cosechadoras y por caminos intransitables", dijo Álvaro Tomas, un productor del distrito de Carlos Casares, en el sur de Buenos Aires, donde se registraron precipitaciones intensas el jueves y viernes.

"En algunas zonas habrá algunas pérdidas por anegamiento de zonas bajas aún no cosechadas. Los rindes están dentro del promedio histórico, no cómo más al norte, donde hubo récords", agregó.