La principal planta proveedora de electricidad del departamento de Caldas anunció que tienen problemas de funcionamiento.
Bogotá. Las intensas olas de calor que desde el mes de abril aumentaron su intensidad en diversos puntos del territorio nacional no sólo han afectado los cultivos de los campesinos sino también en diversas empresas que se nutren del agua como lo son las hidroeléctricas.
En la mañana de este sábado el gerente general de la Central Hidroeléctrica de Caldas, Jhon Jairo Gradana, anunció que es posible que tengan que aplicar algunos recortes en el servicio. Explicó a Caracol Radio que el caudal que alimenta a la hidroeléctrica ha disminuido considerablemente ya que las plantas generadoras de la Esmeralda y San Francisco no tienen la fuerza del afluente.
“Hay una reducción del 50% del agua para la generación de energía, esto nos tiene muy afectados, pues la producción está en un 71%”. El gerente también hizo énfasis en la necesidad de terminar proyectos y obras que le garantizarían a la región la continuidad del fluido eléctrico durante estas oleadas de calor.
Cuando se habla de razonamientos y recortes, los colombianos recuerdan que en 1992, durante el gobierno de César Gaviria, la falta de lluvias obligó a los colombianos a cambiar durante un año sus rutinas de vida. Se trabajó menos en la noche y el país se movilizó para ahorrar agua y electricidad con el fin de usar y desgastar menos las hidroeléctricas, cuyos embalses estaban en sus mínimos posibles.
Las autoridades recomendaron a los habitantes hidratarse constantemente y evitar exponerse directamente al sol así mismo cuidar el líquido vital. También pidieron proteger especialmente a los niños y personas de la tercera edad, quienes son más vulnerables a los efectos de este fenómeno natural.
Los habitantes de zonas rurales han manifestado su preocupación por sus cultivos y animales, es por ello que han realizado un llamado a las autoridades nacionales para implementar planes de prevención que permitan prevenir cualquier afectación.
No podríamos dejar de mencionar que la intensidad que ha alcanzado las olas de calor también están relacionadas con la problemática ambiental que se vive a nivel planetario.
“Las consecuencias que tendrá para América Latina y el Caribe un aumento de la temperatura promedio del planeta en 4ºC, en las próximas décadas, generará un 20% más sequías, un 80% más ciclones tropicales según los resultados del estudio ‘Bajemos la temperatura’”, del Banco Mundial, reseñado por el diario El País de España.
En otros países de la región se han tomado fuertes medidas para enfrentar las olas de calor como reducir la jornada laboral a seis horas como sucedió en meses pasados en el vecino país de Venezuela.