El ataque ocurrió este martes en la noche en una zona rural del municipio de Teorama, en el departamento de Norte de Santander. El bombeo de crudo por la tubería estaba suspendido por actividades de mantenimiento, precisó una fuente de Ecopetrol.
Bogotá. Rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) destruyeron con una bomba un tramo del oleoducto Caño Limón-Coveñas en el noreste de Colombia provocando derrame de petróleo y contaminación ambiental, informaron este miércoles fuentes militares.
El ataque ocurrió este martes en la noche en una zona rural del municipio de Teorama, en el departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela. El bombeo de crudo por la tubería estaba suspendido por actividades de mantenimiento, precisó una fuente de la empresa petrolera.
Ecopetrol -que opera el oleoducto- no precisó inmediatamente el responsable del ataque, pero fuentes militares lo atribuyeron a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Pese a la parálisis del bombeo por el oleoducto de 780 kilómetros con capacidad para transportar hasta 210.000 barriles diarios de crudo, la producción y las exportaciones de crudo de los pozos de Caño Limón, operados por Occidental Petroleum, no han sido interrumpidas.
El oleoducto Caño Limón-Coveñas reanudó operaciones a mediados de julio tras una parálisis de seis meses por una serie de ataques del ELN y el robo de crudo con válvulas ilegales. La tubería ha sido objeto de 63 ataques en lo que va del año.
A comienzos de agosto el expresidente Juan Manuel Santos y esa guerrilla concluyeron en Cuba el sexto ciclo de la negociación de paz sin firmar un cese bilateral al fuego. La decisión de continuar las conversaciones está en manos del presidente Iván Duque, quien exige que el grupo rebelde suspenda unilateralmente sus hostilidades.
El ataque se produce en momentos en que el gobierno de Duque exige la liberación de 19 personas secuestrados por el grupo rebelde para mantener la negociación de paz que busca acabar por completo una confrontación de más de medio siglo que ha dejado 260.000 muertos y millones de desplazados.
El ELN, conformado por unos 2.000 combatientes, se opone a la presencia de empresas multinacionales en el sector minero y petrolero, argumentando que se apoderan de los recursos naturales sin dejar beneficios a la población ni a la economía del país.