Pampa ganó la semana pasada el derecho a negociar exclusivamente por hasta 60 días para comprar una participación de 67,2% en Petrobras Argentina, cuya capitalización de mercado total es de unos US$1.300 millones.
Buenos Aires. La compañía argentina Pampa Energía podría emerger pronto con la emisión de un bono para ayudar a financiar la adquisición de activos de la petrolera brasileña Petrobras, dijo una funcionaria de Pampa al servicio de información IFR.
Pampa ganó la semana pasada el derecho a negociar exclusivamente por hasta 60 días para comprar una participación de 67,2% en Petrobras Argentina, cuya capitalización de mercado total es de unos US$1.300 millones.
La compañía podría financiar el negocio con una combinación de efectivo, la recaudación de la venta de su parte en el operador de gasoductos TGS y la colocación de un bono, dijo Lida Wang, jefa de relaciones con los inversores de Pampa.
"Ya estamos haciendo todos los preparativos para una emisión", dijo Wang a IFR, un servicio financiero de Thomson Reuters. "Tenemos una relación muy buena con los bancos".
El momento dependerá de las condiciones del mercado y los niveles de los diferenciales, que ya están bajo presión ante expectativas de un aumento de las emisiones de deuda del país y de otras empresas y provincias argentinas.
Pampa podría acudir a los bancos para tener un crédito puente mientras tanto, dándole alguna flexibilidad.
La compañía cuenta con alrededor de US$300 millones en efectivo, mientras que su parte en TGS tiene un valor de mercado superior a 250 millones de dólares. Los accionistas de Pampa aprobaron en enero un programa de deuda por US$500 millones, generando especulaciones de que la empresa estaría acumulando recursos para alguna adquisición.
Aparte del financiamiento para fusiones y adquisiciones, la empresa podría tornarse más activa en los mercados de capitales internacionales mientras cosecha los beneficios de las reformas orientadas al mercado del presidente argentino Mauricio Macri e incrementa los gastos de capital.
Pampa, creada en 2005 a través de la fusión de Edenor -que no tenía suficientes fondos- y Transener, se convirtió en la mayor compañía integrada de electricidad de Argentina.
Pero unas tarifas reguladas por el Gobierno desde el default de 2001 de Argentina y la alta inflación han deprimido sus ganancias y el apetito por nuevas inversiones.
"El sistema de generación está completamente colapsado", dijo Wang a IFR. "Eso es algo que requiere fondos y no se pueden obtener localmente. Hay que conseguir fondos en los mercados internacionales".
Su subsidiaria de exploración y producción de gas, Petrolera Pampa, también podría apuntar a una colocación internacional para refinanciar la deuda local de corto plazo con bonos en dólares de más largo vencimiento, en un esfuerzo para complementar su base de ingresos.