Estudiantes de la Universitat Autònoma de Barcelona y de la Ramón Llull diseñan Bioo, un sistema para generar electricidad a partir de las plantas.
La biotecnología se define como el uso de organismos vivos o partes de los mismos para producir bienes y servicios. Una de sus últimas utilidades, inspirándose en las plantas, puede servir para generar electricidad de forma eficiente, sostenible y barata. Gracias al sistema Bioo, diseñado por estudiantes de la Universitat Autònoma de Barcelona y de la Universitat Ramón Llull con la startup Arkyne Technologies, las familias podrían cubrir sus necesidades estándar de electricidad a través de unos paneles de 10×10 metros de vegetación. ¿Pero cómo funciona?
El prototipo creado inicialmente por los alumnos de la UAB consiste en una planta en maceta que permite cargar un teléfono móvil. Su objetivo es ir más allá, puesto que los paneles vegetales generarían electricidad que podría usarse más allá del ámbito doméstico. Según explicaron durante el espacio 4YFN del pasado Mobile World Congress de Barcelona, el sistema “genera una potencia de 3 a 40 vatios por metro cuadrado, a partir de unos paneles vegetales y una batería biológica que aprovecha los residuos energéticos –materia orgánica- que las plantas expulsan al no necesitarlos”.
De este modo, el dispositivo es capaz de producir electricidad constantemente mediante un sistema de autoabastecimiento. Además, de acuerdo a los ingenieros, el funcionamiento no daña a las plantas y cuenta con un coste económico. Los estudiantes aseguran que Bioo es realmente innovador, pues solo hay dos proyectos más fuera de España que hayan apostado por dispositivos parecidos. Sin embargo, a diferencia de estos sistemas extranjeros, la iniciativa de Arkyne Technologies tiene un mínimo de producción eléctrica diez veces mayor, y su implementación es más barata”, indican los creadores.
El equipo ha recibido además recientemente el premio Imagine Express por el desarrollo de una aplicación vinculada a Bioo. Esta app funciona de “puente intermedio” entre los usuarios y los paneles vegetales Bioo para producir electricidad. Por un lado, ayuda a monitorizar la eficacia del sistema en cuanto a producción eléctrica se refiere. Por otro, los estudiantes apuestan por el concepto de “ciudad inteligente” que permita a las personas que utilicen Bioo comprar o vender electricidad. Su objetivo, además de desarrollar estos sistemas en hogares, agricultura o en tejados verdes de edificios públicos, será contar a partir de ahora con inversores que les permitan seguir creciendo.