Holding europeo “R&M Financial Engineers and Trust AG” plantea instalar un ferrocarril. El proyecto precisaría de una inversión global de US$1.050 millones para todo el tramo histórico Asunción-Encarnación.

La distancia de 44 kilómetros Asunción (Estación Botánico, en principio) e Ypacaraí se podría recorrer en un tiempo promedio de 53 minutos en caso de instalarse un sistema de tren urbano entre ambas localidades, según uno de los detalles del proyecto concebido por el holding europeo “R&M Financial Engineers and Trust AG” para el emprendimiento conjunto que tienen planeado con la Coop. Ferroviaria, que a su vez tiene para ello un “contrato de mandato” con Ferrocarriles del Paraguay SA (Fepasa).

El Estudio de factibilidad, que data de julio de 2011 en su versión en inglés y que fue realizado por la consultora europea “Mattig Management Partners”, indica también que el proyecto precisaría de una inversión global de US$1.050 millones para todo el tramo histórico Asunción-Encarnación, lo que ya incluye la construcción de vías, materiales rodantes, estaciones y otros costos.

De los 370 km del recorrido desde Asunción hasta la capital del Itapúa hay 79 km (Artigas-Encarnación) que es responsabilidad de la Binacional Yacyretá, por lo que se calcula que para los 291 km restantes (Asunción-Artigas) los europeos pondrían más de US$850 millones, ya que se maneja un costo de US$2,3 millones por cada kilómetro de vías, más los materiales rodantes (locomotoras y vagones) y las estaciones.

Un menor costo que cualquier autopista. La actual autopista en construcción en Ñu Guasu, que por cierto destruyó de pasó en la zona todas las vías y el terraplén histórico por el que está proyectado que pase justamente el ferrocarril que pretenden instalar en el país la Cooperativa y “R&M”, tendrá una longitud de 6,3 km y un costo global de casi US$45 millones, lo equivale a un precio promedio de US$ 7,2 millones por kilómetros, incluyendo ya los puentes y accesos varios.

Este precio unitario por kilómetros triplica los US$2,3 millones que se prevé para las vías. Si la misma carretera se extendiera hasta Ypacaraí, tendría un costo total de por lo menos US$ 314 millones, mientras que la extensión de los rieles costaría alrededor de US$101 millones, sin contar todas las ventajas de conexión segura y en menor tiempo para los usuarios, menor polución y tarifas más bajas, tanto para pasajeros como para las cargas.

Todo esto sin contar que el financiamiento de la autopista Ñu Guasu proviene totalmente del Estado y en el caso del ferrocarril provendrá de los europeos, que según el contrato de mandato firmado entre Fepasa y la Cooperativa tendrán a cambio un lapso de 20 años (prorrogable por otros 20 años) para explotar el servicio, sin comprometer ningún aval estatal.

Precisamente, el tramo Asunción-Ypacaraí había sido mencionado en una reunión mantenida en setiembre pasado por el presidente de la República, Federico Franco, y algunos ejecutivos de “R&M” encabezados por Gunther Kuhn. Franco había pedido prioridad para un tren urbano y los proyectistas dijeron que podrían habilitar un tren a Ypacaraí en aproximadamente un año, pero cuando se dispusieron a iniciar la tarea en octubre último, el Gobierno comenzó la autopista y congeló su apoyo al plan ferroviario.

En compás de espera. Fuentes de la Cooperativa Ferroviaria informaron en los últimos días que estaban a la espera de una definición por parte del Gobierno respecto al proyecto que tienen para instalar en el país un sistema de trenes. La idea de la entidad, de no ocurrir eso, es recurrir a la Justicia con un recurso de amparo para garantizar el derecho de usufructo que tiene sobre la franja de dominio del ferrocarril, lo que también podría suponer la paralización de obras en la autopista Ñu Guasu que el MOPC lleva adelante con celeridad. Los contratistas del ministerio justamente comenzaron en la primera semana de octubre por levantar todas las vías desde la Estación Botánico hasta las cercanías de la Conmebol, ya en Luque.