Esta entidad estaría manejando la posibilidad de no aprobar un crédito no reembolsable de unos de US$120 millones que deben ser destinados al mejoramiento en el tramo Luque-Ñu Guasu-Asunción.

El Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) estaría manejando la posibilidad de no aprobar un crédito no reembolsable, una donación, de alrededor de US$120 millones que deben ser destinados al mejoramiento de la entrada y salida de la ciudad capital, y que consiste en obras en el tramo Luque-Ñu Guasu-Asunción, según volvieron a insistir este martes referentes de la construcción.

La adjudicación de las obras tuvo lugar en diciembre pasado y a cuatro meses todo está paralizado. La donación de los US$120 millones podría quedar sin efecto, de acuerdo a lo que señalaron.

Este fondo debe ser complementado con una contrapartida local de US$70 millones, aproximadamente.

Aducen que no se comunicaron sobre adendas firmadas al organismo regional.

El ministro de Obras, Cecilio Pérez Bordón, en una nota dirigida al ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Lara Castro, menciona que este procedimiento de las adendas es normal y se realizó con el proyecto de interconexión eléctrica de 500 kV (Itaipú-ANDE), el proyecto de interconexión eléctrica de 500 MW (Uruguay- Brasil), el proyecto Concepción-Vallemí, donde los procesos fueron abreviados y simplificados.

En sectores de la construcción expresaron que se maneja el rumor de que altas autoridades de Hacienda están interesadas en declarar desierta la licitación para redireccionar una nueva licitación hacia otras empresas que cuentan con la simpatía de altas autoridades de esa cartera de Estado.

Las empresas adjudicadas. El 22 de diciembre pasado, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) adjudicó el tramo 1 de la obra al consorcio Tecnoedil-Heisecke- Ocho A, por G. 112.798 millones (US$25,7 millones) y el tramo 2 al consorcio “Las Residentas”, conformado por CIVSA- M&T-SA, por valor de G. 85.239 millones.

Una nueva licitación podría significar la demora de entre uno y dos años en la ejecución de la obra, la que de ser judicializada por las empresas adjudicadas podría demandar incluso más tiempo, con el enorme prejuicio para Asunción que cuenta con esta vía de acceso y salida totalmente colapsada en términos de uso por los automovilistas.