La Administración Nacional de Electricidad (ANDE) pierde el 31,2% de toda la energía que retira de las hidroeléctricas, lo que significa en términos monetarios unos US$15 millones al mes.

Son alarmantes las pérdidas de energía que registra la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) por conexiones clandestinas y pérdidas técnicas en sus líneas de transmisión. De toda la energía que retira de las centrales hidroeléctricas pierde el 31,2%, según Lindolfo Segovia, uno de los técnicos de la ANDE.

Estás pérdidas significan unos US$15 millones al mes, según el técnico. Haciendo los cálculos encontramos que las pérdidas totales en un año trepan a US$180 millones. Del porcentaje total de pérdidas, el 15% es debido a robo o conexiones ilegales y el resto por sobrecarga en las redes de transmisión, explicó el técnico.

A fines del mes pasado comenzaron los operativos para reducir el porcentaje de fuga de energía porque así lo exigió el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en el marco de un préstamo para ejecución de proyecto.

Iniciaron los trabajos en la zona de Salto del Guairá, donde los usuarios se quejan de los cortes permanentes de energía y la baja tensión en época de mayor demanda.

La ANDE tuvo que invertir millones de dólares en la instalación de generadores térmicos a diésel a fin de garantizar el suministro eléctrico. Todos saben que este tipo de energía es mucho más cara que las generada por las hidroeléctricas.

Los técnicos detectaron alrededor de 150 conexiones clandestinas solo en Salto del Guairá. De esos, 100 ya fueron intervenidas por la Fiscalía. En su mayoría, los inmuebles pertenecen a ciudadanos brasileños, que no se encontraban en el sitio en el momento de la intervención. Cada usuario ilegal contaba con transformador propio, según Segovia.

“Es bastante triste que en la frontera se presente este tipo de situaciones a causa de la ausencia del Estado y de la propia ANDE a la que se le precarizó. No se le permitió dotar de vehículos a las oficinas regionales para hacer este tipo de trabajo”, lamentó el técnico.

Los funcionarios de la empresa estatal trabajaron en todo Paraguay para localizar los sitios donde hay robo o hurto de energía. Inclusive utilizaron GPS (Sistema de Posicionamiento Global) para marcar el sitio exacto.