El consejero económico de la embajada de Perú en España -Bernardo Muñoz- ha participado en una jornada explicativa de las oportunidades de negocio para las empresas españolas en su país.
Perú tiene unas necesidades en infraestructuras de unos US$88.000 millones, según ha calculado el consejero económico de la embajada peruana en Madrid, Bernardo Muñoz, quien lo ha considerado como una oportunidad de negocio para las empresas españolas.
El consejero económico de la embajada de Perú en España ha participado en una jornada explicativa de las oportunidades de negocio para las empresas españolas en su país, organizada por la Confederación Vallisoletana de Empresarios (CVE).
En declaraciones a EFE, Bernardo Muñoz ha insistido en que, además de la inversión económica, su país necesita técnicos y expertos que puedan desarrollar las infraestructuras y, en un cálculo aproximado, ha cifrado esta carencia de especialistas en unas 300.000 personas, lo que para él supone una oportunidad de trabajo.
Además de lo que ha llamado "inversión fresca", Perú precisa, a su juicio, de personal especializado y con buena preparación para desarrollar las infraestructuras que no se han podido llevar a cabo ante la falta de expertos y técnicos locales.
La inversión española en Perú supera los US$9.000 millones y genera directamente más de 500.000 puestos de trabajo, ha indicado el consejero económico de la legación peruana, para quien los empresarios españoles, principalmente los pequeños y los medianos, tienen en todos los sectores de su país oportunidades de negocio.
Sin embargo, ha centrado en las operaciones de transferencia tecnológica y en la maquinara los "grandes nichos" de negocio para las empresas españolas, pero con el apoyo de las empresas locales, por lo que ha insistido en la necesidad de crear "alianzas estratégicas" entre compañías españolas y peruanas para que "todas se beneficien".
El consejero económico peruano ha garantizado la seguridad jurídica que ofrece su país a los inversores extranjeros y ha recordado que para comprobarlo "solamente basta con mirar lo que ha pasado en los últimos quince años", tras lo que ha explicado que la política económica peruana se ha planteado a "largo plazo" y que se trata de una "cuestión de Estado" y no del gobierno de turno en la que el "tractor" es la iniciativa privada.