Petrobras, como es conocida la compañía, también recortó sus inversiones en un 13% después de que un enorme escándalo de corrupción la obligó a dejar de pagar o emplear a cerca de dos decenas de compañías clave de construcción e ingeniería.
Río de Janeiro. La estatal Petróleo Brasileiro SA superó las expectativas de los analistas, al reportar el viernes ganancias en el primer trimestre con pocos cambios frente al mismo periodo del año pasado, en vista de que el término de subsidios a la gasolina ayudó a contrarrestar un derrumbe en los precios del crudo.
Petrobras, como es conocida la compañía, también recortó sus inversiones en un 13 por ciento después de que un enorme escándalo de corrupción la obligó a dejar de pagar o emplear a cerca de dos decenas de compañías clave de construcción e ingeniería.
El escándalo, en el que fiscales dicen que los contratistas realizaron cobros excesivos por obras y destinaron los fondos adicionales al soborno de políticos, ha llevado a la renuncia de casi todos los ejecutivos de alto rango de Petrobras, una amortización de 6.200 millones de reales (2.100 millones de dólares) y a la paralización de gran parte de las actividades de la empresa desde noviembre.
La menor actividad ayudó a Petrobras a reducir sus costos operativos en un 22 por ciento y pareció controlar su creciente carga de deuda. La empresa busca recuperar la confianza de los inversores después de que registró una pérdida de casi 9.000 millones de dólares en el cuarto trimestre, la más grande en su historia.
"El resultado fue muy positivo", dijo el gerente de Finanzas, Ivan Monteiro. "Este proceso tomará un largo tiempo, peor nosotros esperamos recuperar lentamente la confianza de los inversores", agregó.
Petrobras dijo que sus beneficios en los tres meses terminados el 30 de marzo cayeron un 1,2 por ciento, a 5.330 millones de reales (1.780 millones de dólares), comparado con los 5.390 millones de reales un año antes, según un documento enviado al regulador de valores brasileño.
El resultado superó las expectativas de una utilidad trimestral de 2.500 millones de reales, según el promedio de las estimaciones de siete analistas encuestados por Reuters. Uno de los analistas proyectó una pérdida neta.
La compañía también informó ventas netas, o las ventas menos los impuestos, de 74.400 millones de reales, en general en línea con las expectativas de 79.400 millones de reales.
Si bien la caída de un 49 por ciento en el precio del petróleo borró el impacto de un aumento de un 11 por ciento en la producción de crudo, esto fue contrarrestado por los ahorros que resultaron del término de un subsidio a los combustibles.
Como resultado, las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) -una medida de los flujos de caja- fueron de 21.500 millones de reales, más de un tercio por sobre los 16.000 millones de reales estimados en el sondeo.
Los costos de la importación de combustibles han caído, por lo que el valor de la gasolina y el diesel en el mercado mundial estuvo en línea con los precios domésticos.
En los últimos años, Petrobras perdió más de 60.000 millones de reales al subsidiar los combustibles domésticos debido a que el Gobierno, que buscaba controlar la inflación, mantuvo los precios por debajo de los niveles mundiales.
Después de que la compañía enfrentó una exclusión de los mercados financieros debido a que el escándalo de corrupción la obligó a retrasar la entrega de sus resultados del tercer trimestre, el Gobierno cedió en noviembre y permitió que Petrobras subiera en un 5 por ciento el precio del diesel y un 3 por ciento el de la gasolina.
Durante todo el primer trimestre, los precios domésticos estuvieron por sobre los internacionales, lo que puso fin al subsidio y ayudó a la unidad de refinación a registrar una utilidad de 6.180 millones de reales, su primera ganancia en años. En el 2014, la unidad perdió 4.810 millones de reales.
El buen resultado de la unidad de refinación compensó el impacto de la caída de un 18 por ciento en el valor promedio del real brasileño frente al dólar estadounidense.
La depreciación del real hizo que la deuda de Petrobras en dólares aumentara, lo que elevó las pérdidas financieras no operativas.
Petrobras, el gigante petrolero más endeudado del mundo, vio crecer su deuda en reales en un 14 por ciento frente al cierre del cuarto trimestre a 400.400 millones de reales. Su deuda en dólares cayó un 2 por ciento a 103.600 millones.