La última alza de los combustibles registrada este jueves en Chile implica un aumento en el costo de 79 pesos (US$0,16) promedio en apenas dos meses.
Santiago, Xinhua. Las alzas en el precio de la gasolina en Chile han sido sistemáticas durante estos primeros meses del año, debido tanto al aumento del valor internacional como a un impuesto específico que eleva las cifras afectando a los consumidores, informó hoy la prensa local.
La última alza de los combustibles registrada este jueves en Chile implica un aumento en el costo de 79 pesos (US$0,16) promedio en apenas dos meses.
Esto ubica a la gasolina de 93 octanos en 799 pesos (US$1,68 dólares) el litro promedio en la capital Santiago, mientras que la de 97 en 824 (US$1,74 dólares), y la de 95 en 821 (US$1,73 dólares).
Pero debe considerarse que los precios finales de la gasolina varían de acuerdo a la realidad de los distintos mercados en el país, siendo más caro en regiones extremas o en zonas residenciales de mayores recursos.
Además, en Chile existe un sistema de cálculo de precios que incluye el costo de traer el petróleo desde el Golfo de México, pagando impuestos de aduanas, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y un impuesto por volumen, que representa hoy en día más de un tercio del precio total, que se aplica principalmente a la gasolina.
Ese último impuesto al volumen es el llamado "impuesto específico", cuyo objetivo central es la gasolina, para minimizar el impacto al diesel, y así no afectar al transporte.
De acuerdo con la Empresa Nacional de Petróleo (ENAP), esta alza se debe a que "durante el período de referencia (4 al 15 de febrero), subieron los precios de todos los combustibles en el mercado de la Costa del Golfo de México, impulsados por el cierre de refinerías y los paros por mantenimiento", dijo en su informe.
Las alzas han provocado quejas, no sólo por los costos que traen a los automovilistas, sino también al transporte de carga y de pasajeros, que terminarán afectando a los consumidores.
Pero también trajo críticas al Sistema de Protección al Contribuyente del Impuesto Específico a los Combustibles (Sipco), creado en 2011, el cual trata de compensar el costo del combustible con el impuesto específico, que no ha funcionado como se esperaba.
El presidente de la Federación Nacional de Buses Interurbanos (Fenabus), Marcos Carter, por ejemplo, criticó el bajo proteccionismo que existe hacia su gremio por parte del Estado.
"Somos los principales perjudicados en esto. El alza en los combustibles, sin ninguna medida proteccionista, encarece nuestros gastos operacionales", dijo.
Cuando se registran subidas en el precio internacional de los combustibles, éstas no son traspasadas inmediatamente a los consumidores, gracias a un sistema de banda de precios que lo mitigan, que es el Sipco.
Si el alza del petróleo supera en 12,5% un determinado precio de referencia establecido por el Ministerio de Economía, el Sipco opera bajando parte del Impuesto Específico a los Combustibles.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, explicó que "el precio del petróleo a nivel mundial ha aumentado, y tenemos una merma en la capacidad de refinación en Estados Unidos, y Chile importa más del 98% del combustible que consume.
"Este no es un problema del Sipco", argumentó enfático el ministro, señalando que este sistema sí ha operado y contenido los efectos del aumento de precios de los combustibles", al menos una de cada cuatro semanas desde su creación en marzo de 2011.
Sin embargo, aclaró que el Sipco no podrá operar esta semana debido a que no hay razones que permitan el incremento.
Pero "de mantenerse las condiciones actuales, podría operar la próxima semana", aseguró Larraín.
El jefe de las finanzas públicas recalcó que por el momento no se ha pensado en modificaciones al instrumento u otro mecanismo que pueda mitigar las alzas.
