Francesco Starace señaló que Enel presentará 2015 un nuevo plan de inversiones global que dijo será "bastante fuerte en países como Chile, en particular, en infraestructura de red y generación de energía".
Santiago de Chile. El presidente ejecutivo de la eléctrica italiana Enel, Francesco Starace, se reunió este viernes en Santiago con el ministro de Hacienda chileno, Alberto Arenas, y destacó el potencial que presenta el país austral para realizar inversiones en el ámbito energético.
"No tenemos muchos países como Chile en el mundo así de atractivos para invertir en energía", señaló el ejecutivo tras el encuentro.
Enel es propietaria de Endesa Chile, la mayor generadora eléctrica del país, y de Enersis, su brazo de inversiones en América Latina.
La italiana tomó recientemente el control directo de las firmas chilenas que anteriormente operaban a través de Endesa España.
Starace señaló que Enel presentará 2015 un nuevo plan de inversiones global que dijo será "bastante fuerte en países como Chile, en particular, en infraestructura de red y generación de energía".
"La única cosa que tenemos en Chile es la cantidad de oportunidades que está ofreciendo y la posibilidad de hacerlas todas bien", enfatizó.
Además, Starace se refirió a la interconexión de energía en Chile, donde actualmente operan dos sistemas de transmisión separados que abastecen de energía al norte y al centro-sur del país.
"En los próximos años en Chile vamos a tener una atención muy importante a la conexión eléctrica entre zonas. Es un país que tiene una geografía muy particular y, por lo tanto, la transmisión de energía va a ser bastante interesante en los próximos años", apuntó.
No obstante, el número uno de Enel indicó que lo primordial para determinar el futuro de una inversión es el plazo de tramitación de los permisos.
"Como en todos los países, el plazo de un proyecto no puede ser dimensiones inhumanas. Creo ésta es la cosa más importante. No es un problema de tamaño técnico (del proyecto), es un problema de plazo", sentenció.
Endesa sufrió un serio revés este año cuando el gobierno chileno desechó la realización del megaproyecto Hidroaysén, que pretendía construir cinco represas sobre dos ríos de la Patagonia para generar unos 2.750 megavatios.
La iniciativa era impulsada desde hace varios años por Endesa y el grupo local Colbún, aunque desde sus inicios experimentó un fuerte rechazo de comunidades que se sentían afectadas en la austral región de Aysén y de grupos ambientalistas.