El diseño definitivo del proyecto, elaborado por el Consorcio L1, integrado por las firmas españolas IDOM, Euroestudios y la colombiana Cano Jiménez, dictaminó un presupuesto muy superior al último diseño conceptual de 2011.
Bogotá. La Alcaldía de Bogotá reveló hoy que la construcción de la primera línea del metro de la capital, la obra más importante de la historia de la ciudad, costará unos 15 billones de pesos colombianos (casi US$7.000 millones), según un estudio final de la megaobra.
Las cuentas definitivas se presentaron hoy en una rueda de prensa en Bogotá, que discute la construcción del metro desde 1942, cuando la ciudad contaba con 400.000 habitantes, muchísimos menos que los casi ocho millones de hoy.
El diseño definitivo del proyecto, elaborado por el Consorcio L1, integrado por las firmas españolas IDOM, Euroestudios y la colombiana Cano Jiménez, dictaminó un presupuesto muy superior al último diseño conceptual de 2011, que planteaba siete billones de pesos colombianos (unos US$3.455 millones).
"El presupuesto tan elevado responde a la mala calidad de los suelos blandos y a la compra de predios en Bogotá", afirmó el representante del consorcio colombo-español L1, José María Villarroel, quien expuso los detalles técnicos, causantes de que se haya disparado el presupuesto.
La primera línea, que tendrá un recorrido de 27 kilómetros, atravesará la ciudad de sur a norte, entre el populoso sector de Bosa y la calle 127, y se calcula que transportará a unos 800.000 pasajeros diarios a partir de su entrada en funcionamiento, prevista para 2021.
"Bogotá está al límite de la capacidad del tránsito público", dijo el experto español, quien tras quince meses de estudio determinó que la primera línea contará con 27 estaciones subterráneas, que permitirán la conexión de los pasajeros con otros sistemas de transporte masivos.
Según el estudio, el metro será eléctrico, totalmente automatizado, sin conductores y las obras comenzarían a finales de 2015, previa licitación.
El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, explicó que el sistema de transporte masivo "de alta calidad" será un "generador de oportunidades" para la ciudad y aumentará la "productividad" y la "calidad de vida" de los bogotanos.
Para la Administración de Petro, la "gran discusión" para la realización final del metro serían las fuentes de financiación del megaproyecto, que a pesar de estos estudios podría no llevarse a cabo.
Según Petro, el metro sería cofinanciado por la Nación y el Distrito Capital.
Sin embargo, el Gobierno nacional aún no ha decidido cuánto está dispuesto a aportar, pues los presupuestos para los próximos cuatro años, denominados Plan Nacional de Desarrollo, no estarán listos hasta principios del próximo año.
Los cálculos que maneja la Alcaldía dicen que la megaobra debe financiarse en un 30 % por el Distrito Capital y en un 70 % por la Nación.
Con las cuentas definitivas sobre la mesa, Petro explicó que esta tarde comenzará la ronda de encuentros para determinar cuánto pone cada parte, una negociación que se prevé complicada pues debe ser compatible con otros grandes proyectos de la capital colombiana como la ampliación del aeropuerto Eldorado.
El esperado metro de Bogotá ha sido pospuesto en anteriores ocasiones por problemas presupuestarios, por lo que esta estimación es vista con recelo por quienes consideran que ahora la tarea es aún más titánica al doblar su coste.