Con el concurso, la secretaría de Energía pretende que el Centro Nacional de Control de Energía (CFE) adquiera 2.500 MW adicionales, es decir, 16% de su capacidad actual de energía limpia.
El Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) publicará a principios de esta semana la primera convocatoria para que el suministrador básico para los hogares, que será la Comisión Federal de Electricidad (CFE), adquiera hasta 2.500 megawatts (MW) adicionales, lo que equivale a casi 16% de su capacidad instalada actual de energía limpia, lo que atraerá inversiones por 60.000 millones de pesos (US$3.624,9 millones).
En entrevista con El Economista, el subsecretario de Electricidad, César Emiliano Hernández Ochoa, de la Sener, detalló que el principal objetivo de este concurso abierto a todos los participantes no es el incremento de la capacidad, a pesar de que en los próximos 15 años se prevé un incremento en la demanda de hasta 60.000 MW —el doble de la capacidad actual—, sino llegar a la meta de energías limpias del suministrador básico, ya que los generadores limpios pueden estimar precios de generación a largo plazo al no sufrir la volatilidad de los combustibles, por lo que la competencia será entre generadores de energías como la solar, eólica, hidroeléctrica, biomasa, geotérmica nuclear, consideradas energías limpias, porque no generan emisiones de carbono.
Y es que, al igual que el resto de los generadores eléctricos del país, en el 2018 la CFE tendrá la obligación de generar por lo menos 5% de su energía mediante fuentes limpias, por lo que además de comprar cerca de 6 millones de certificados de energías limpias (CEL) en el mismo proceso —para cumplir con el requisito en unos 685 MW— la CFE también deberá incrementar su capacidad de generación limpia.
Para este concurso se espera la participación de entre 20 y 30 empresas que podrán presentar paquetes que incluyan energía, potencial y CEL, aunque podrían ser más o menos, dijo el subsecretario de Electricidad, y dado que el criterio de adjudicación de los contratos a 15 años será el menor costo por megawatt hora, podrán participar empresas de todos los tamaños, entre las que ha destacado el interés de Enel, Comexhidro, Abengoa, Acciona, Grupo Dragón e Iberdrola, entre otras.
De acuerdo con el manual para estas subastas, publicado en el Diario Oficial de la Federación la semana pasada, el volumen definitivo de energía será dado a conocer hasta enero del próximo año, mientras que la adjudicación de los contratos está prevista para marzo del 2016. Los participantes de esta subasta reversible ofertarán el precio del volumen de megawatts hora constantes que podrán generar para el suministro básico a lo largo de 15 años, en la subasta de energía, y la capacidad instalada para horas pico —con precios por hora y día—, con el fin de evitar apagones, en la llamada subasta de potencia.
“Estamos frente al primer mercado eléctrico que se implementará en el país: el de largo plazo. Los participantes van a competir con base en los costos que sus eficiencias les permitan, es algo que ya se ha hecho en el mundo y que funciona”, dijo el subsecretario de Electricidad.
Garantías de la CFE. Uno de los temas más controversiales en torno a estas subastas fue la capacidad de financiamiento de los potenciales ganadores para proyectos por los cuales apenas estarían concursando, por lo que durante la discusión de los distintos ordenamientos para el diseño de estas subastas se recibieron más de 400 cuartillas de al menos 100 interesados en el tema, para llegar a la determinación de que los proyectos contarán con tres años de maduración ente su adjudicación y fecha de arranque, dando a los generadores el tiempo suficiente para capitalizarse con el respaldo de una empresa estatal.
En abril del próximo año se llevará a cabo una segunda subasta por el mismo volumen de energía y las mismas características, en la que se espera el mismo monto de inversiones, detalló.