Inspectores de sanidad de Brasil dijeron el lunes que la escasez de personal y los recortes de presupuesto impuestos por el gobierno son los factores que en definitiva causaron los problemas sanitarios con envíos de carne de vacuno, que llevaron a que Estados Unidos vetara la carne fresca brasileña.
Inspectores de sanidad de Brasil dijeron el lunes que la escasez de personal y los recortes de presupuesto impuestos por el Gobierno son los factores que en definitiva causaron los problemas sanitarios con envíos de carne de vacuno, que llevaron a que Estados Unidos vetara la carne fresca brasileña.
El Sindicato Nacional de Auditores Fiscales Federales Agropecuarios (ANFFA) señaló que en el país cerca de 270 instalaciones de procesamiento de carne operan sin la presencia de inspectores.
Brasil cuenta con cerca de 4.800 instalaciones de envasado de carne autorizadas para vender al exterior.
La semana pasada, Estados Unidos prohibió las importaciones de carne fresca brasileña, argumentando que encontró abscesos en los productos y que detectó fallas sistemáticas en las inspecciones.
El Gobierno había negado el viernes que hubiera deficiencias con las inspecciones y dijo que era probable que los problemas indicados por las autoridades estadounidenses tuvieran relación con determinadas vacunas.
La prohibición estadounidense de carne brasileña se produjo tres meses después de una amplia crisis desatada tras la revelación de una investigación policial en torno a presuntos sobornos a funcionarios de salud por parte de compañías procesadoras de carne.
El Ministerio de Agricultura no comentó de immediato el comunicado de ANFFA emitido el lunes.