"Esto es nuevo. Viene con las tecnologías para que crezca más rápido. Creo que está viniendo de allá (Estados Unidos) la tecnología", dijo un militar a cargo de un batallón que cortaba plantas de marihuana de metro y medio de altura en los márgenes de un río cercano a la polvorienta localidad de Amata, en Sinaloa.
Amata. Productores de marihuana en remotas montañas mexicanas están adoptando técnicas que comenzaron en Estados Unidos para producir una planta de mejor calidad que les dé mayores ganancias, lo que está alimentando la violenta guerra del narcotráfico en el país.
En los fértiles valles montañosos del estado de Sinaloa, en el noroeste de México, soldados han encontrado este año 24 hectáreas de invernaderos equipados con sofisticados sistemas de riego y fertilización donde crecen interminables filas de plantas de marihuana.
En otra región de Sinaloa, sede de uno de los más poderosos cárteles de las drogas, el Ejército decomisó recientemente un laboratorio con plantas de marihuana en macetas que estaban siendo alumbradas día y noche con lámparas.
Este es un cambio desde el tradicional sistema de cultivo de la droga y una señal de que los cárteles mexicanos están usando métodos más novedosos.
"Esto es nuevo. Viene con las tecnologías para que crezca más rápido. Creo que está viniendo de allá (Estados Unidos) la tecnología", dijo un militar a cargo de un batallón que cortaba plantas de marihuana de metro y medio de altura en los márgenes de un río cercano a la polvorienta localidad de Amata, en Sinaloa.
Mientras las estimaciones varían, funcionarios de ambos lados de la frontera dicen que los cárteles mexicanos obtienen grandes cantidades de dinero produciendo marihuana, y usan parte de esos ingresos para apuntalar los enfrentamientos contra rivales y fuerzas del gobierno.
Los cruentos choques han dejado en el país más de 33.000 personas muertas en los últimos cuatro años.
Mientras cientos de soldados a lo largo de Sinaloa cortan las plantas de marihuana a mano, los cárteles están un paso adelante de los esfuerzos del Gobierno, lo que no ayuda a la ofensiva frontal contra narcotraficantes lanzada por el presidente Felipe Calderón.
"Es un ciclo", dijo otro militar en Amata mientras que 20.000 plantas de marihuana que fueron empapadas de diésel se quemaban provocando una nube de humo blanco. "Nosotros venimos, lo arrancamos, vamos a otras áreas y ellos regresan y empiezan a preparar la tierra otra vez", agregó.
Para el Ejército es difícil en ocasiones detectar los nuevos invernaderos mediante sobrevuelos ya que se asemejan mucho a los cultivos de tomate, muy comunes en Sinaloa.
Marihuana de calidad. Si los cárteles en México logran mejorar la calidad de las drogas, pueden vender marihuana en cinco veces el precio normal. Las libra de marihuana mejorada llega a costar US$2.500 mientras que una libra de la tradicional cuesta unos US$500, según funcionarios estadounidenses de policía.
Las nuevas tácticas de cultivo son una señal de que los cárteles mexicanos están obligados a competir con productores estadounidenses que han mejorado la calidad de la droga mientras ha ido en aumento el uso médico de la marihuana.
"Yo he estado en la policía antidrogas desde 1970 y nunca en mis sueños más locos había pensado que yo iba a estar diciendo que California está produciendo más marihuana que México", dijo Bill Ruzzamenti, un policía especializado en el tráfico de marihuana en el Valle Central de California.
"Pero hay gente dispuesta a gastar su dinero en lo que ellos piensan que es marihuana de primera calidad en comparación con la porquería mexicana", agregó.
Los decomisos de plantas de marihuana en California crecieron cerca de 300% en los últimos cuatros años. La producción se incrementó al sur de la frontera estadounidense también entre el 2006 y el 2008, pero no tanto.
Los cultivos clandestinos de marihuana están apareciendo con mayor frecuencia en Estados Unidos, incluso en parques nacionales.
Ruzzamenti especuló que productores mexicanos en Estados Unidos están aprendiendo de botánicos que cultivan nuevas variedades de marihuana con nombres como "train wreck" (tren descarrilado) y "California dream" (sueño de California).
El tráfico en Estados Unidos ha ido a la alza en parte porque el contenido del THC, el ingrediente activo de la droga, se dispara cuando es cuidada en invernadero.
El THC en la marihuana decomisada en Estados Unidos aumentó un 250% en las últimas dos décadas, según el Departamento de Estado.
Algunas variedades de marihuana en Estados Unidos contienen más de un 30% de THC, mientras que la mexicana promedia entre un 3% y un 4%, según especialistas.