El fabricante de automóviles francés dijo a General Motors que le debe más de 500 millones de euros y que tiene la intención de presentar una demanda legal porque a su juicio fue engañado sobre la estrategia de emisiones de Opel.
París. El Grupo PSA, que pagó a General Motors 1.300 millones de euros para adquirir Opel, ahora quiere que la mitad de este dinero sea devuelto tras descubrir la magnitud total de las multas europeas por emisiones de dióxido de carbono, dijeron fuentes a Reuters.
El fabricante de los vehículos Peugeot, que completó la adquisición de Opel a fines de julio, dijo a principios de noviembre que tendrá que trabajar más rápido de lo previsto para que los modelos Opel tengan una tecnología más eficiente de consumo de combustible y reducir así las emisiones de dióxido de carbono antes de que se establezcan gradualmente nuevos límites en la UE entre 2020-2021.
El fabricante de automóviles francés dijo a General Motors que le debe más de 500 millones de euros y que tiene la intención de presentar una demanda legal porque a su juicio fue engañado sobre la estrategia de emisiones de Opel, dijeron dos personas familiarizadas con el asunto.
PSA está buscando entre 600 y 800 millones de euros, según una de las fuentes.
Las empresas han discutido las quejas planteadas por PSA,que aún no ha iniciado una demanda formal, según fuentes cercanas a ambos fabricantes de vehículos.
El portavoz de GM David Caldwell se negó a hacer comentarios cuando fue consultado por Reuters sobre la posible demanda y la denuncia de que GM engañó a PSA.
El portavoz de PSA Bertrand Blaise también se negó a hacer comentarios.
Los fabricantes de automóviles están luchando para reducir las emisiones de carbono al 2021, cuando bajen sus límites individuales impuestos por la UE a un promedio de 95 gramos por kilómetro desde los 130 gramos de la actualidad.
El desafío está generando grandes inversiones en motores más pequeños y nuevas tecnologías de sistemas de propulsión, desde autos a batería hasta híbridos recargables. Para aquellos que incumplan sus objetivos, unas multas de 95 euros por vehículo, por cada gramo de CO2 que se exceda, podrían sumarse a cientos de millones de euros anuales.
PSA cree que GM tergiversó las dificultades que enfrentaba Opel en el tema de las emisiones de dióxido de carbono durante las negociaciones y en la revisión de los libros de contabilidad previa al acuerdo de adquisición logrado en marzo y tras su cierre formal el 31 de julio.