El proyecto gana relevancia cuando la exploración mineral sufre un declive por la caída de los precios internacionales de las materias primas.
Santa Rosa de Osos, Colombia. La canadiense Red Eagle Mining invertirá US$120 millones en la construcción de una mina subterránea para extraer oro en el noroeste de Colombia, el primer proyecto aurífero en el país en más de dos décadas, dijo un alto ejecutivo de la empresa.
El proyecto gana relevancia cuando la exploración mineral sufre un declive por la caída de los precios de las materias primas, a lo que se suman, según fuentes del sector, demoras en las licencias ambientales, protestas de las comunidades y vacíos jurídicos que enfrenta la minería en Colombia.
"Es una mina subterránea que va a procesar 1.000 toneladas de mineral al día y de la que se buscan extraer durante la fase de explotación unas 400.000 onzas de oro, es decir 50.000 onzas anuales durante ocho años", dijo el martes en una entrevista con Reuters Rafael Silva, gerente en Colombia de Red Eagle Mining.
"Se han invertido US$40 millones en los últimos cinco años en la exploración. Después del otorgamiento de la licencia ambiental logramos financiar US$80 millones para la construcción de la mina", explicó mientras recorría el área en donde pronto comenzará la construcción de lo que apunta a ser la mina subterránea de oro más grande del país.
La empresa canadiense sería la primera en arrancar la producción de una mina de oro en Colombia después de más de dos décadas. Espera hacerlo a finales del 2016 en el yacimiento San Ramón, ubicado en una zona montañosa cerca al pueblo de Santa Rosa de Osos, en el departamento de Antioquia.
Otras mineras auríferas llevan más de una década esperando licencias, enfrentando protestas de las comunidades que se oponen a sus proyectos o cambios en la legislación.
Silva dijo que Red Eagle inscribirá acciones en la Bolsa de Colombia después de que comience la producción. Actualmente cotiza en las bolsas de Toronto y de Santiago.
Colombia, que produjo el año pasado 57 toneladas de oro, enfrenta una desaceleración de su economía por la caída de los precios del petróleo, la principal fuente de ingresos fiscales por exportaciones, impuestos y regalías.
Y aunque es el cuarto exportador mundial de carbón y un importante abastecedor de níquel, los precios internacionales de esos metales también enfrentan mercados de bajos precios.
Silva sostuvo que si se concreta un acuerdo de paz con la guerrilla izquierdista de Colombia podría aumentar la búsqueda de oro en sus tres cordilleras andinas que no han sido exploradas y obtener en el futuro importantes recursos fiscales.
"Con la situación que hay de la dependencia del petróleo y del carbón, el sector minero y el aurífero va a poder mitigar de alguna manera toda esa falta de ingresos que tiene actualmente el Estado", aseguró.
"Es importante que varios proyectos de oro sean ese colchón que le permita al Estado poder continuar con su proyecto social de inversión en infraestructura, le veo un buen futuro", dijo.