Las operaciones de PDVSA este año han estado afectadas por problemas que van desde la rápida declinación de la producción de crudo y la limitada refinación debido a la falta de equipos, hasta los obstáculos para exportar petróleo en medio de sanciones financieras.
La refinería Isla con capacidad de procesar hasta 335.000 barriles por día (bpd), operada por la estatal PDVSA, continúa trabajando al mínimo mientras espera nuevos envíos de crudo venezolano, dijeron este lunes a Reuters cuatro fuentes cercanas a la planta.
Las operaciones de PDVSA este año han estado afectadas por problemas que van desde la rápida declinación de la producción de crudo y la limitada refinación debido a la falta de equipos, hasta los obstáculos para exportar petróleo en medio del embotellamiento de puertos y sanciones financieras.
Sólo algunas unidades de la refinería se han mantenido operando desde mayo, cuando la petrolera estadounidense ConocoPhillips intentó embargar inventarios y activos de PDVSA en el Caribe. Ningún cargamento de petróleo venezolano ha sido enviado a la instalación desde finales de abril y la estatal no tiene planeado despachos en junio, de acuerdo a reportes comerciales internos de la compañía vistos por Reuters.
Pero nuevos cargamentos de crudo podrían ser recibidos por la refinería Isla a través de transferencias de tanquero a tanquero, que se sumarían a los inventarios existentes, cuyo procesamiento está previsto para las próximas semanas, según las fuentes.
PDVSA comenzó a utilizar las transferencias marítimas a principios de este mes para aliviar los cuellos de botella de tanqueros en sus principales puertos, lo que ha afectado las exportaciones petroleras a clientes desde Estados Unidos hasta China.
La transferencia de buque a buque o el STS (por su sigla en inglés), podría ayudar a PDVSA a evitar una nueva incautación en Curazao, donde Conoco retuvo temporalmente inventarios el mes pasado hasta que un tribunal local dictaminó que el petróleo a ser procesado en la refinería no debería ser objeto de acciones legales, ni tampoco el combustible producido, pues este debe continuar siendo distribuido en la isla.
El dinero resultante de la venta del combustible en Curazao se mantendrá en custodia hasta que se resuelva la disputa entre Conoco y PDVSA, según decidió el tribunal el mes pasado. Desde entonces, la empresa venezolana ha evitado el envío de petróleo desde y hacia al menos tres islas del Caribe.
PDVSA no respondió a una solicitud de comentarios.
"PDVSA prometió a la refinería que el cargamento va a llegar, es un acuerdo ya alcanzado, se está a la espera de la entrega", dijo una de las fuentes.
No fue posible saber de inmediato cuánto crudo procesa Isla actualmente.