Las acciones de Renault subían el viernes después de que la empresa reveló un aumento del 17% en sus ganancias operativas, a 3.854 millones de euros (US$4.840 millones).
El fabricante de automóviles Renault registró ventas y ganancias récord en 2017, reforzando la posición de su presidente ejecutivo Carlos Ghosn frente a las demandas del gobierno francés sobre un plan de sucesión más claro y una integración más profunda con su socio Nissan.
Las acciones de Renault subían el viernes después de que la empresa reveló un aumento del 17% en sus ganancias operativas, a 3.854 millones de euros (US$4.840 millones), y de un 14,7% en sus ingresos, a 58.770 millones de euros, por la fuerte demanda europea.
Las utilidades y el margen récord superaron las expectativas de los analistas de 3.650 millones de euros en ganancias operativas, en base a la mediana de 14 estimaciones de un sondeo elaborado para Reuters. Los ingresos se situaron por debajo de su consenso de 59.250 millones de euros.
Las acciones de Renault subían un 2,91% a 88,54 euros a las 1111 GMT. Las ganancias operativas en su principal división automotriz, excluyendo el recientemente consolidado negocio AvtoVAZ en Rusia, aumentaron un 15,2% a 363 millones de euros.
La compañía elevó su dividendo propuesto en un 12,7% a 3,55 euros por acción y se comprometió a mantener su margen operativo por encima del 6% en 2018, a pesar del empeoramiento de los efectos cambiarios que borraron 303 millones de euros de sus ganancias de todo el año.
El sólido desempeño financiero de la automotriz podría ayudar a Ghosn a resistir la presión del gobierno francés, el mayor accionista de Renault, para lograr una alianza más estrecha con Nissan que también sirva a los intereses nacionales. El Estado francés tiene una participación del 15% en Renault y dos puestos en su directorio.
Pero Ghosn, nacido en Brasil, dejó en claro que Renault y Nissan no tienen prisa por fusionarse y reiteró su opinión de que era imposible un acuerdo completo mientras Francia mantenga una participación importante en Renault.
“No veo cómo el lado japonés va a aceptar nuevos pasos (hacia una fusión) con el Estado francés como principal accionista”, dijo Ghosn a analistas.