El proyecto permitirá que 211.000 personas tengan servicio de agua por lo menos doce horas continuas por día en el área metropolitana de Santiago de los Caballeros.
La República Dominicana mejorará el servicio de agua potable para 329.000 habitantes en el área metropolitana de Santiago de los Caballeros con un préstamo de US$25 millones aprobado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El proyecto permitirá que 211.000 personas tengan servicio de agua por lo menos doce horas continuas por día. Además, tiene como objetivo mejorar la eficiencia energética de los operadores del servicio de agua y la gestión integral del servicio a través de inversiones en infraestructura y apoyo al fortalecimiento institucional a Coraasan (Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago).
Se anticipa que el proyecto permitirá una disminución tanto de las pérdidas físicas de agua distribuida al sistema como de los costos operativos de energía. “Mediante este proyecto el Banco apoyará a la República Dominicana a incrementar la calidad y continuidad del servicio de agua potable en zonas urbanas y periurbanas, mejorando así la eficiencia operativa y comercial del servicio prestado”, dijo Javier Grau Benaiges, jefe del equipo del proyecto del BID.
Los componentes del proyecto incluyen la inversión en obras para mejorar la cobertura y gestión operativa de los servicios de agua potable mediante la implementación de mejores sistemas de bombeo, sectorización de redes, remplazo de tuberías, mejoras de los sistemas de captación, así como el apoyo a la gestión institucional de servicio con programas de gobernanza corporativa y sistemas de información, entre otros.
En años recientes la continuidad del servicio de abastecimiento de agua potable en Santiago ha sido afectada por un fuerte crecimiento poblacional en las zonas periurbanas, particularmente en las áreas de mayor elevación, debido, entre otros factores, al aumento de la inmigración proveniente de otras zonas del país.
El crédito del BID de US$25 millones tiene un plazo de 25 años, con 5,5 años de gracia y una tasa de interés basada en LIBOR.