La OPEP, junto con Rusia y otros exportadores externos al grupo, se comprometieron a reducir su producción petrolera en 1,8 millones de barriles de crudo por día (bpd) durante el primer semestre de 2017.
Moscú. La producción petrolera de Rusia podría alcanzar su tasa más alta en 30 años si la OPEP y exportadores fuera del grupo no extienden un pacto de reducción al bombeo más allá del 30 de junio, según funcionarios rusos y detalles de planes de inversión divulgados por firmas petroleras.
La OPEP, junto con Rusia y otros exportadores externos al grupo, se comprometieron a reducir su producción petrolera en 1,8 millones de barriles de crudo por día (bpd) durante el primer semestre de 2017.
Pero ante el gran volumen en las existencias, los productores del Golfo y otros países han manifestado su disposición a extender el pacto hasta finales de año. La semana pasada, Arabia Saudita y Kuwait señalaron que estaban dispuestos a prolongar la reducción del bombeo.
Rusia, que se comprometió a un recorte de 300.000 bpd, todavía no ha dicho públicamente si adhiere a esa postura. Sin embargo, representantes del país estaban presentes en un panel que la semana pasada recomendó la extensión del acuerdo.
Sin embargo, funcionarios rusos han indicado que las petroleras locales estaban listas para elevar su producción una vez que el pacto pierda vigencia.
"Según los programas de inversión de las firmas (rusas), es posible que la producción petrolera rusa suba una vez que expire el trato", declaró el viceprimer ministro Arkady Dvorkovich.
El ministro de Energía Alexander Novak dijo a Reuters en marzo que la producción podría llegar a un volumen entre 548 millones y 551 millones de toneladas anuales en 2017, equivalentes a entre 11,01 y 11,07 millones de bpd, el promedio más alto desde 1987.