Los fondos por 1.480 millones de euros (US$1.930 millones) procedentes de la venta de la participación de Renault en Volvo financiarán inversiones domésticas e internacionales, y reducirán la deuda neta, que se mantenía en 818 millones de euros el 30 de junio.

París/Estocolmo. La venta por parte de Renault de su participación en el fabricante de camiones Volvo a fin de invertir en sus negocios centrales ha dado a la compañía sueca una mayor libertad para abordar sus dificultades en Europa.

La automotriz francesa estuvo cerca de realizar una fusión con Volvo en 1993 y había mantenido su participación en la empresa desde el 2011, cuando vendió su propia división de camiones al fabricante de autos sueco a cambio de acciones.

Enfrentadas a un declive que ha enviado las ventas a mínimos cercanos a 20 años, las automotrices europeas han tenido que recortar costos, eliminar empleos y cerrar plantas.

Renault ha dicho que no tiene planes de cerrar instalaciones pero está buscando concesiones de sindicatos para lograr un acuerdo laboral a nivel nacional.

Los fondos por 1.480 millones de euros (US$1.930 millones) procedentes de la venta de la participación de Renault en Volvo financiarán inversiones domésticas e internacionales, y reducirán la deuda neta, que se mantenía en 818 millones de euros (US$1.065,4 millones) el 30 de junio.

Renault se ha establecido la meta de conseguir un flujo de caja positivo este año, incluso pese a que revisó a la baja su proyección para todo el año en el mercado europeo a una contracción del 8%, en el mejor de los casos.

Su rival PSA Peugeot Citroen, en tanto, eliminará 10.000 empleos y una planta doméstica para compensar por pérdidas que llegan a los 200 millones de euros al mes.

La decisión de Renault deja a la firma de inversión sueca Industrivarden como la mayor accionista en Volvo con un 15,6% de la participación con derechos de votación, una cifra que podría querer elevar tras la venta de títulos por parte de la automotriz francesa.

"Uno puede imaginarse que Industrivarden compre algunas de las acciones para quedar en terreno seguro", dijo el estratega de empresas Mattias Eriksson de Nordea. "En ese caso ellos estarían buscando asegurar el primer puesto como propietarios", aseveró.

Industrivarden declinó hacer comentarios.

Las acciones de Renault subían 2,27% este jueves a 40,530 euros (US$52,7) a las 15:33 GMT. En tanto, los papeles de Volvo bajaban 3,8% a 92,25 coronas suecas.