El consejo de administración del gigante financiero también anunció este jueves un beneficio neto atribuido de unos 5.800 millones en 2014.
El Banco Santander ampliará su capital hasta en 7.500 millones de euros para ganar cuota de mercado en los países donde está presente y recuperará este mismo año el dividendo en efectivo, aunque la remuneración total al accionista baja un 66,6 %, de 0,60 euros hasta 0,20 euros por título.
El consejo de administración del gigante financiero, que también ha anunciado hoy un beneficio neto atribuido de unos 5.800 millones en 2014, un incremento ligeramente superior el 30 % respecto a 2013, ha tomado estas decisiones en una reunión extraordinaria en la que decidió que el dinero que capte le ayudará a crecer orgánicamente.
Así es de esperar que poco a poco la retribución al accionista vaya mejorando, puesto que ahora se reduce drásticamente y la rentabilidad por título apenas rondará el 3 %, puesto que en 2015 será de 0,20 euros.
Este dividendo se abonará en cuatro pagos, tres en efectivo y otros tres en nuevos acciones o en efectivo, a elección de los accionistas, con el objetivo final de distribuir en metálico entre el 30 y el 40 % del beneficio recurrente del banco.
Si se tiene en cuenta que en los últimos años el banco ofrecía 0,60 euros por acción y más del 85 % de los titulares no cobraba el dividendo en efectivo, la nueva política puede llegar a suponer doblar la cantidad de dinero que el banco destina a retribuir a sus accionistas, se han esforzado en explicar desde la entidad.
Pero volviendo a la ampliación de capital, el Santander venderá hasta 1.258,4 millones de nuevas acciones entre grandes inversores.
El éxito de la operación, que se lleva a cabo a través de una colocación acelerada de acciones, está asegurado por el banco de inversión estadounidense Goldman Sachs y el suizo UBS.
Los nuevos títulos comenzarán a cotizar el próximo 13 de enero y apenas una hora después de iniciarse su venta, la demanda ya superaba los 7.500 millones, según ha anunciado en un encuentro con la prensa el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez.
Sin embargo, la colocación no está prevista que culmine antes de la apertura de la bolsa de mañana viernes, cuando se conocerá el descuento al que previsiblemente se habrán vendido las acciones, que hoy fueron suspendidas de cotización poco antes de las 14 horas, cuando subían un 3,33 %, hasta 6,856 euros.
El nuevo "número dos" del Santander no ha querido aventurar el porcentaje que estarían dispuestos a aceptar para considerar un éxito la colocación, pero ha insistido en que va "muy bien" y ha descartado que vaya a ser de un 16 %, como se llegó a especular esta tarde.
Además, también ha negado que la ampliación vaya a servir para comprar el banco italiano Monte dei Paschi, una entidad que ni siquiera les interesa, y ha insistido en que se hace para acompañar el crecimiento del banco en las economías en las que está presente.
En una nota, la presidenta de la entidad, Ana Patricia Botín, ha añadido que confía en la mejora de la economía en todos los países en los que el banco está presente y en el potencial del Santander para crecer orgánicamente, aumentar el crédito y seguir apoyando a sus clientes, tanto particulares como empresas.
En una presentación a analistas, el banco recoge que Portugal y España están saliendo de la crisis; Reino Unido y Estados Unidos continúan su recuperación; Chile, Polonia y México crecen, y la ralentización de Brasil no impedirá que el crédito aumente entre un 7% y un 8% anual.
La ampliación de capital mejorará la solvencia del grupo en 140 puntos básicos hasta cerca del 10% una vez descontadas todas las deducciones de los próximos cinco años, lo que se conoce como "fully loaded" en el argot financiero, según ha añadido el director general financiero del banco, José García Cantera.