El sector tecnificado de camarones llegará a producir unas siete millones de libras. Cada año se producen alrededor de 1,5 millones de larvas, de las cuales el 30% se exporta a El Salvador y Costa Rica, y el resto se vende en el mercado local.
La falta de lluvia que afectó la producción de alimentos, como los granos básicos, beneficiará este año al sector tecnificado de camarones, que llegará a producir unas siete millones de libras —20% más que los dos últimos años—.
Según representantes del sector, el invierno poco copioso evitó que los estanques se inundaran y se perdiera buena parte de la cosecha.
“En el 2010 sufrimos pérdidas del 25% y el año pasado, del 20% por las lluvias; en cambio, este año se espera una producción normal sin pérdidas”, refirió Gabriel Biguria, gerente de la compañía Acuamaya.
El ciclo productivo del crustáceo que se cultiva bajo sistemas tecnificados comienza en mayo y concluye a finales de año, expresó Biguria.
Cada año se producen alrededor de 1,5 millones de larvas, de las cuales el 30% se exporta a El Salvador y Costa Rica, y el resto se vende en el mercado local.
Las larvas se cultivan en Guatemala en unas dos mil cien hectáreas de estanques, donde se engorda a los camarones hasta que lleguen al peso ideal.
El 95% de camarones se exporta a Europa, México, Taiwán, y hasta ahora se comienza a vender a China.
En el mercado internacional un kilo de camarones (2,20 libras) importados desde Guatemala puede llegar a costar US$5.
Tecnificación. Ricardo Santa Cruz, director del sector Agrícola y de Pesca de la Asociación Guatemalteca de Exportadores, expuso que desde hace 25 años se impulsa la camaronicultura.
“El sector de camarones se ha tecnificado y ahora produce sus propias larvas en cautiverio, que benefician la producción y evitan enfermedades a los consumidores, pues antes se capturaban larvas en el mar”, afirmó.
Luis López, jefe de la Dirección de Normatividad de la Pesca y Acuicultura del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, señaló que “este año el sector de camarones tuvo menos riesgo de pérdidas debido a las pocas lluvias”.
López refirió que los estanques de tilapia tampoco se han inundado. “Los pescadores del mar tienen problemas, pues debido a que el agua está caliente en la orilla los peces se alejan”, agregó.
“La extracción de peces en el mar ha bajado entre 50% y 60% por el verano y falta de lluvias”, indicóÓscar Marroquín, miembro de la Federación Nacional de Pescadores Artesanales.