Entre enero y noviembre de 2017 el valor de producción de empresas constructoras se desplomó en términos acumulados en 21 de los 32 estados de México, siendo Oaxaca el más golpeado con una contracción de 47,1%.

Ciudad de México. El sector de la construcción está en crisis en 21 de los 32 estados de México. Entre enero y noviembre de 2017 el valor de producción de empresas constructoras se desplomó en términos acumulados en algunas de estas regiones.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), las cifras acumuladas a noviembre revelan que Oaxaca es el estado donde la construcción ha sido más golpeada. Comparado con 2016, el valor de producción de las empresas constructoras en la entidad cayó 47,1% en términos reales, lastrado por la caída en los proyectos de obra pública en el estado.

Guerrero y Campeche, que reportan bajas acumuladas de 40,2 y 39,5%, respectivamente, son los siguientes estados donde las obras de construcción más se han recortado: Puebla, Hidalgo, Tlaxcala, Quintana Roo, Sinaloa, Veracruz, Tabasco, Michoacán, Chiapas, Tamaulipas, Chihuahua, Durango, Aguascalientes, Yucatán, San Luis Potosí, Baja California, Nuevo León y Querétaro completan la lista.

Para algunos casos el clima de incertidumbre en torno al futuro de la relación comercial entre Estados Unidos y México ha hecho que inversionistas opten por posponer e incluso cancelar proyectos de construcción en ciertas regiones, como podría ser el caso de los estados del bajío (Querétaro, San Luis Potosí, Aguascalientes) o de algunos estados del norte del país (como Nuevo León, Chihuahua o Baja California)

En el caso de estados como Veracruz, Yucatán, Tamaulipas, Tabasco y Campeche la crisis en la plataforma de producción petrolera ha consumido el interés por desarrollar proyectos en estas regiones altamente dependientes del sector petrolero.

La construcción a cargo del sector público es otro de los factores que ha puesto freno a la construcción con recortes al gasto realizados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en línea con su estrategia de consolidación fiscal.

A nivel nacional la construcción a cargo del sector público, que aporta cerca del 39% de lo producido por el sector constructor en el país, se redujo 9,6% real acumulado a noviembre, hilando cinco años sin poder levantar en periodos similares.

Aunque con un ajuste marginal, la construcción financiada con fondos privados se elevó entre enero y noviembre de 2017. Empero, con un alza de 0,3% real el sector reporta el desempeño más modesto en siete años en respuesta al adverso clima de inversión que imperó durante el año pasado.

Cuatro de los seis segmentos de la construcción, que en suma concentran alrededor del 62% de la producción del sector, reportaron pérdidas en los 11 meses analizados del 2017. Entre ellos la edificación es el rubro más importante y se advierte que a noviembre su valor de producción cayó 2,2% real, enmarcando la primera baja para la rama en cuatro años.

La historia es diferente en Morelos, el Estado de México, Coahuila, Baja California Sur, Sonora, la Ciudad de México, Zacatecas, Colima, Guanajuato, Jalisco y Nayarit. En estas regiones la construcción se expandió, de manera especialmente significativa en zonas como Morelos, el Estado de México y Coahuila, donde los incrementos fueron de 55 a 72% en cifras acumuladas.