Cámara de Urbanizadores de Nicaragua (Cadur) prevé vender casi el doble de casas este año, como producto de unas reformas legales que facilitan el acceso a las viviendas de interés social, informó ayer el presidente de la organización, Ricardo Meléndez.
Managua. "Estamos colocando alrededor de 3.500 viviendas anuales. Con estas reformas esperamos colocar entre 5.000 y 6.000 viviendas, por lo menos", dijo Meléndez a medios del gobierno.
Antes de las reformas, aprobadas la semana pasada, una familia nicaragüense debía tener ingresos mínimos de US$387 mensuales para aspirar a una vivienda en una urbanización; ahora el mínimo son US$310.
La diferencia de US$77 parece mínima, pero representa casi el 50% del salario mínimo promedio en Nicaragua.
"Con esto se ha incrementado la cantidad de gente que puede comprar una casa", afirmó el expresidente de Cadur, Alberto Atta.
La reforma elevó de US$20 mil a US$32 mil el monto de las viviendas que tendrán un subsidio estatal del 2.5% de la tasa de interés, que actualmente es del 9%.
Asimismo, el Estado garantizará una prima de hasta US$2 mil para las viviendas consideradas de interés social; es decir, las que tengan 60 metros cuadrados de edificación y un costo de construcción de US$20 mil.