“Si las cortes siguen abriendo consultas previas en forma retroactiva y parando los proyectos y las ampliaciones, no vamos a ver el año dorado del carbón en 2018”, advierte el presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM).
La inseguridad jurídica y la actividad electoral pueden hacer explotar los pronósticos para 2018 en el sector de la minería extractiva y el próximo puede no ser el año para el brillo de la inversión extranjera en esta industria.
“El tema de incertidumbre de seguridad jurídica más elecciones no es una buena combinación y los inversionistas están siendo cautos a la hora de invertir”, dijo el presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), Santiago Ángel Urdinola.
En medio de este escenario, hay una luz de esperanza porque este año la inversión extranjera ha mostrado un repunte diferente a lo que sucedió en 2016, cuando se fueron del país US$97 millones. Este año, la actividad minera espera cerrar con un aporte de recursos extranjeros por US$700 millones frente a unas proyecciones de US$1.500 millones. Para 2018 se espera inversión extranjera directa por US$1.500 millones, “en este momento no se sabe si la proyección de los US$1.500 millones sea una realidad, dado el nerviosismo que existe por la inseguridad jurídica”, advirtió Ángel al destacar que se conoce de grandes grupos mineros internacionales que han aplazado la inversión en el país por la inseguridad jurídica y las inversiones.
La producción del carbón preocupa al gremio. “La decisión sobre arroyo Bruno de la Corte Constitucional puede afectar seriamente las metas de producción del país”, considera el presidente de la ACM. “La idea es que de los últimos 4,8 kilómetros del Bruno se desvíen 3,6 km. Ese tramo lo correrían unos 700 metros hacia el norte y así se podrían expandir los límites actuales de la mina en 170 hectáreas. Debajo de aquella agua hay un buen trozo de carbón: 35 millones de toneladas que ayudarían a mantener su producción”, decía El Espectador en marzo de 2015. La empresa afectada es Cerrejón.
Ángel insiste en que la producción de carbón para 2018 estaría en entredicho si el tema de “las cortes no se arregla”.
ACM estima que 2017 cerrará con cifras menores a las de un año atrás, por el ajuste en la explotación del interior. “El carbón del Cesar y La Guajira aumentarían en cerca de 2% su producción, pasando de 79,8 a 81,5 millones de toneladas; la del centro del país caería cerca del 40 % dado que la cifra de producción del año anterior fue de 10,7 millones de toneladas, muy por encima del promedio histórico de la industria”, dice el gremio minero. Santiago Ángel Urdinola fue enfática en indicar que “si las cortes siguen abriendo consultas previas en forma retroactiva y parando los proyectos y las ampliaciones, no vamos a ver el año dorado del carbón en 2018”. El principal mercado para el mineral colombiano es Turquía y ahí hay un negocio asegurado, indicó un analista del sector.
La producción de oro está en blanco y negro. Se pasó de 250.000 onzas el año pasado a un poco más de 280.000 en que puede terminar este año. Muy a pesar de los 42 días del paro en Segovia (Antioquia), la producción y la industria minera formal crecen al 12%.
“La paz social entre la pequeña y la gran minería hoy en día está pasando una cuenta positiva en el aumento de la producción”, señaló Ángel. Esa formalización ha permitido un aporte de 10.000 onzas nuevas de oro. “Nosotros estamos apostando a que el oro gris va a caer en cerca de 30 %. Va a pasar de 1,7 millones de onzas a algo cercano a 1,2 millones, porque las comercializadoras no están comprando y a las plantas de beneficio les están pidiendo licencia ambiental”, indicó el dirigente gremial al destacar que la lucha contra la minería ilegal está funcionando.
Finalmente, ACM considera que el PIB minero va a presentar una caída de entre 6 % y 7 % por la producción de carbón del interior y el mayor control de la producción ilegal de oro.
En definitiva, la apuesta mayor va por que el precio de los commodities(materias primas) no se caiga a niveles inadecuados.