El programa de teléfono y video Skype se sumió este miércoles en un apagón del servicio a nivel mundial que ha subrayado un punto débil del software de comunicación gratuita online.
Nueva York. El programa de teléfono y video Skype se sumió este miércoles en un apagón del servicio a nivel mundial que ha subrayado un punto débil del software de comunicación gratuita online.
Skype espera alcanzar los US$1.000 millones (unos 761 millones de euros) en una Oferta Pública Inicial (OPI), dijeron a Reuters en noviembre fuentes relacionadas con el asunto. Una de ellas dijo que la OPI llegaría en algún momento del 2011.
Skype se fundó en 2003, y eBay lo compró en 2005 por US$3.100 millones.
En noviembre, eBay vendió una participación mayoritaria a un grupo inversor, quedándose actualmente con el 30%.
Skype, parcialmente propiedad de eBay, dijo que algunos usuarios estaban teniendo problemas para registrarse. Usuarios de Estados Unidos, Asia y Europa se quejaron en la red social Twitter del apagón de este programa.
Precisamente en Twitter, la compañía de siete años de vida se ha disculpado por la interrupción y ha afirmado estar investigando las causas. Alrededor de las 15:30 horas del Este de Estados Unidos, la empresa dijo que el servicio había vuelto a la normalidad, aunque llevaría varias horas que todo el mundo pudiese utilizar de nuevo el programa.
El hasta ahora inexplicable apagón, que tuvo lugar justo unos días antes de Navidad, ha supuesto un nuevo golpe a la reputación del servicio.
Llamadas que se pierden y la calidad de la comunicación son desde hace tiempo las puntos débiles de Skype, que ofrece un servicio gratuito de voz y de video entre sus usuarios, además de llamadas de bajo costo a teléfonos fijos. En octubre tenía unos 124 millones de usuarios.
El anterior gran apagón que sufrió la compañía tuvo lugar en agosto de 2007, tras una actualización rutinaria de su software.
Muchos consumidores se han mostrado reacios a dar de baja sus teléfonos fijos y depender exclusivamente de servicios como Skype, debido en parte a cuestiones como su fiabilidad. Tales problemas, unidos a la preocupación existente por la seguridad online, han ralentizado la expansión de Skype en el mercado.
La firma se enfrenta además a la competencia de otros proveedores de telefonía online, como Google, que permite a sus usuarios hacer llamadas a través de sus cuentas de correo en Gmail, y de herramientas de videoconferencia, como el servicio "umi", de Cisco Systems.
