En ocasión de su visita a Asunción, el director argentino de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Humberto Schiavoni, había anunciado la revisión de los contratos firmados por la anterior administración.
Asunción. El contrato para la reparación de las máquinas que fue adjudicado sin licitación a la fabricante Voith Hydro, en principio fue US$ 100 millones y después ampliado a US$ 250 millones. Exsindicalista de la entidad denuncia que los trabajos se realizan sin ningún tipo de control.
En ocasión de su visita a Asunción, el director argentino de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Humberto Schiavoni, había anunciado la revisión de los contratos firmados por la anterior administración, a cargo de Óscar Thomas, entre ellos, el de la reparación de las turbinas con la empresa Voith, que también había sido cuestionada por los consejeros paraguayos. Al respecto, el exsecretario general del Sindicato de Trabajadores de Yacyretá (Sinatray), Florentín Gómez del Puerto, señaló que existen serias sospechas de sobrefacturación, teniendo en cuenta que todos los documentos fueron manejados de forma unilateral por las autoridades argentinas.
“Tal contrato es una afrenta a la participación paraguaya en los reparos de las turbinas. Por citar un ejemplo, vemos que todos los insumos se compran de la Argentina a través de la Voith en cantidades multimillonarias en dólares americanos, sin ningún control de las autoridades paraguayas, convirtiéndose en un festín de sobrefacturaciones”, señaló Gómez del Puerto. Asimismo, dijo tener sus dudas respecto a la auditoría ordenada por las nuevas autoridades a la Universidad de La Plata. “Hasta hoy no he escuchado de nuestras autoridades la reivindicación de la participación paraguaya en dicha auditoría, lo que acarrea una sospecha justificada de que ese contrato se continuará cocinando entre gallos y media noche”, señaló.
Insistió en que no se justifica la no intervención paraguaya en tal auditoría; pues de lo contrario, “con la nueva administración argentina de la EBY continuará la misma política de tomar decisiones en forma unilateral y nosotros también con la misma política del entreguismo”, enfatizó. Recordó que, en su momento, como sindicato advirtieron a la margen derecha de la EBY que las reparaciones se estaban convirtiendo solamente en remiendos y que eran realizadas con mano de obra no especializada.
En opinión del especialista José Luis Enciso, el incumplimiento del Anexo B del Tratado de Yacyretá, al no contar con el embalse compensador, facilitó la creación de lo que él denomina “un nuevo rubro delictivo” en la EBY, que es la reparación continúa e ininterrumpida de las turbinas.
“El daño patrimonial ocasionado a Yacyretá por el incumplimiento del Tratado debería ser cubierto del patrimonio personal de sus violadores. El pueblo paraguayo esta exento de pagar la negligencia de sus funcionarios”, señaló Enciso.