La investigación abre la puerta ahora a una reestructuración del directorio, la reformulación de las ganancias y multas potencialmente elevadas para el conglomerado, en el mayor escándalo corporativo de Japón en años.
Tokio. Toshiba infló sus ganancias operacionales en 151.800 millones de yenes (US$1.220 millones) durante varios años de irregularidades contables "institucionales" que involucran a altos ejecutivos, informó una comisión independiente en un reporte el lunes.
La investigación abre la puerta ahora a una reestructuración del directorio, la reformulación de las ganancias y multas potencialmente elevadas para el conglomerado, en el mayor escándalo corporativo de Japón en años.
El presidente ejecutivo de Toshiba, Hisao Tanaka, y su predecesor, el vicepresidente de directorio, Norio Sasaki, estaban al tanto de la sobreestimación de ganancias y retrasaron reportes de pérdidas en una cultura corporativa que "impedía ir en contra de los deseos de los superiores", dijo el panel en un informe resumido presentado por Toshiba a la Bolsa de Tokio.
Las cifras sobreestimadas exceden más de tres veces la estimación inicial de Toshiba.
Fuentes dijeron que Tanaka y Sasaki renunciarán en los próximos meses y que gran parte del directorio será reemplazado para asumir las responsabilidad de las irregularidades.
El reporte agregó que gran parte de la contabilidad indebida, que data del año fiscal 2008, fue intencional y que habría sido difícil que los auditores la detectaran.
El informe dijo que Tanaka y Sasaki, que fueron también presidentes de forma consecutiva, establecieron objetivos de ganancias operacionales que los jefes de las divisiones debían cumplir, aplicando presión al insinuar despidos en las áreas que tuvieran un rendimiento inferior.
"Al interior de Toshiba había una cultura corporativa en la que uno no podía ir en contra de los deseos de los superiores", dijo el reporte.
"Por ende, cuando la directiva presentaba 'desafíos', los presidentes de las divisiones, los gerentes de línea y empleados por debajo de ellos llevaban a cabo continuamente prácticas contables inapropiadas para cumplir con los objetivos, en línea con los deseos de sus superiores", agregó.
La indagación se produce en momentos en que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, intenta mejorar la gobernanza corporativa del país a fin de atraer a más inversores externos.
Toshiba no ha podido cerrar su contabilidad del último año fiscal debido a la investigación, que también ha obligado a suspender el dividendo anual.