Luego de realizar asambleas extraordinarias, los trabajadores de la minera, concluyeron que la oferta no aborda las demandas planteadas y aseguraron que establece condiciones laborales "perjudiciales".

Santiago.- Los trabajadores de Escondida en Chile, el mayor yacimiento de cobre del mundo, acordaron rechazar la última oferta contractual de la empresa y votar ir a huelga, dijo el sindicato en un documento interno al que accedió Reuters este viernes.

Luego de realizar asambleas extraordinarias en los últimos días, los trabajadores de la minera -controlada por la angloaustraliana BHP- concluyeron que la oferta no aborda las demandas planteadas y aseguraron que establece condiciones laborales "perjudiciales".

"Es por ello que por aclamación y de forma contundente en todas las asambleas, los socios se expresaron por rechazar esta oferta y votar la huelga legal", según el documento interno del sindicato.

Los operarios de la mina, ubicada en el norte del país, iniciarán la votación formal de la oferta este sábado y los sufragios se extenderán hasta mediados de la próxima semana.

Las cruciales negociaciones ocurren poco más de un año después del fracaso de un acuerdo laboral que originó una histórica huelga de 44 días, sacudió el mercado mundial del cobre, y dejó enormes pérdidas económicas en Chile.

Escondida había mejorado esta semana su oferta al sindicato, con un incremento en un bono de término de conflicto y otros beneficios por un total de US$27.700 un reajuste salarial, en un intento por llegar a un acuerdo.

La minera ofrece un total de 18 millones de pesos (US$27.854) por trabajador, que incluye una compensación por término de un beneficio de plan habitacional. Este monto, en todo caso, sería inferior a los 23 millones de pesos (US$35.500) que recibieron los trabajadores sindicalizados en la anterior negociación el 2013.

Junto con este monto, la compañía también ofreció un ajuste salarial del 1,5%, a lo que se sumaría la variación porcentual de la inflación acumulada en el semestre o de manera anual.

En la propuesta del sindicato a la empresa, presentada a inicios de junio, se pedía un bono único equivalente al 4% de las ganancias en 2017, es decir, casi US$40.000 por trabajador. Los operarios también solicitaban un aumento salarial del 5% real.

El documento interno del sindicato destacó que en las últimas asambleas se explicó a los trabajadores los planes de acción estudiados y preparados para esta fase de las negociaciones.

"Nuestro próximos pasos, tras aprobar la huelga, buscarán alcanzar un acuerdo justo y razonable con la empresa. Deben ser eliminadas las condiciones perjudiciales de la última oferta y debemos avanzar en nuestros puntos principales", dijo el sindicato en el documento.

No fue posible obtener inmediatamente comentarios de la compañía.

De confirmarse la votación a favor de la huelga, la legislación laboral chilena establece que las partes tienen cinco días adicionales para negociar bajo la mediación de una agencia gubernamental.