Aunque hay otros proyectos que utilizan energías renovables, el primer tren que se alimentará completamente del sol para funcionar comenzará a moverse pronto en Australia.

La empresa Byron Bay Railroad Company está ultimando todos los detalles para poner en marcha el primer tren solar del mundo. El proyecto nació cuando encontraron un viejo tren abandonado, lo restauraron y le añadieron placas solares para moverse a lo lago de tan sólo 3 kilómetros de ruta. Es así como se explica que pueda funcionar, y es así como se explica que otros países donde los avances del ferrocarril llegan antes, como España o Japón, aún no cuenten con un tren eléctrico de este tipo.

El tren original contaba con dos motores diesel, el primero de los cuales ha sido sustituido por motores eléctricos y baterías, mientras que el otro ha sido dejado intacto para emergencias o en caso de que fallase el conectado a las placas solares. El sistema está pensado paa funcionar con las baterías incluso cuando haya nubes y el sol no impacte directamente, pero en alguna situación los 77 kWh podrían no ser suficientes.

Para esos casos también se ha previsto que, además de la captación de energía de las placas, en la estación de destino haya un punto de carga de 30 kW. Como repasan en Electrek, no se trata del primer tren en ser potenciado por renovables, pero sí el primero en no depender de otras fuentes de energía, que aunque fuesen limpias, no eran recogidas por el propio tren.

Otro país ejemplar en esto es Países Bajos, que desde comienzos de 2017 tiene a toda su flota de trenes potenciados completamente por renovables. En su caso han optado por la energía eólica para el proyecto. Como decíamos, la diferencia radica en que no es el tren el que absorbe esa energía del viento, sino que la compañía que lo gestiona se vale de molinos de viento intalados en Holanda, Bélgica y Finlandia.

Otro ejemplo de esta dependencia es el de la India, que aunque también tiene trenes que captan energía solar, lo hacen solo para el caso de la energía consumida por el aire acondicionado y el sistema de luces, pero no para el movimiento sobre las vias, que sigue dependiendo de una locomotora diésel. La de Australia es, sin duda, una gran noticia para acabar el año.