En las vides que soportaron aquella granizada se intentó, durante la semana pasada, rescatar algo, pero el daño fue casi total y esa uva no se vinificará.
La uva que no fue dañada por el temporal del jueves 24 de enero comenzó a ser cosechada esta semana, apreciándose una muy buena calidad en el producto y la ausencia de adversidades sanitarias, lo que permitirá elaborar muy buenos vinos, informó a El Observador el productor Aramir Silva, presidente del Centro de Viticultores del Uruguay (CVU).
En las vides que soportaron aquella granizada se intentó, durante la semana pasada, rescatar algo, pero el daño fue casi total y esa uva no se vinificará.
En las uvas que se cosechan en estos días en la zona de influencia de Canelones y Las Piedras, por ejemplo, “se están levantando uvas que tienen de 11 a 14 grados alcohólicos, es decir que presentan una calidad óptima”, indicó.
Eso, explicó, “luego del duro golpe que significó el temporal de granizo es una linda noticia”.
La granizada, que indujo al gobierno a diseñar asistencias para el sector granjero –que en el subsector de la viticultura se ejecutan desde el Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi)–, determinó que la expectativa de cosecha caiga entre 10% y 15%, a unos 100 millones de kilos en el caso de la vendimia de 2013; no obstante la plaza local y externa podrán ser debidamente abastecidas.
De esos 100 millones de kilos que se obtendrán, el 70% es generado por las empresas vitivinícolas y el resto por unos 1.000 productores vitícolas en todo el país, cuya rentabilidad depende únicamente de un buen precio por la comercialización de la uva.
En el caso del CVU se han ido coordinando planes de negocios con el respaldo del gobierno y de la industria en los que se involucra un volumen de unos 9,5 millones de kilos de uva que se negocian a cuatro bodegas.
Silva recordó que para este año se han acordado precios que permiten cubrir los costos productivos en líneas generales, “aunque tenemos mucha expectativa por un precio mejor, un pago adicional por el vino, que se pueda lograr en el caso de planes de negocios con un subsidio del gobierno que consideren vinos elaborados con esas uvas con destino a la exportación”.
En ese marco, la directiva del CVU “se ha declarado en sesión permanente”, atenta a que surjan novedades al respecto, “habiendo generado una enorme expectativa la reciente misión oficial en el mercado de Rusia”.
Sobre esa gestión, liderada por el ministro Tabaré Aguerre, “tenemos muy buenas perspectivas para que se siga abasteciendo cada vez más y mejor a ese mercado, pero también a China y Brasil, e incluso que se puedan abrir otros mercados”, señaló.
Al cierre de esta edición estaba prevista una reunión de los directivos de la gremial de los viticultores con el presidente del Inavi, José María Lez, “para poder recibir de primera mano una evaluación de la misión que se realizó en Rusia, sobre la que tenemos indicios de que fue realmente muy positiva para el país y a todo nivel”, indicó Silva.