En vista del acercamiento de las relaciones entre Venezuela y Colombia, tratamos de normalizar el mercado con el país hermano. En septiembre vamos con las primeras 26.000 toneladas, de las 60.000 que les solemos vender", dijo el presidente de la acería, Carlos D' Olivera.

Caracas. La siderúrgica estatal venezolana Sidor retomará las exportaciones de acero al mercado colombiano en septiembre, dijo el presidente de la acería, Carlos D' Olivera, citado por medios locales el viernes.

Colombia y Venezuela intentan recomponer sus relaciones comerciales, luego de haber restablecido sus lazos diplomáticos en agosto, tras superar un conflicto que primero derrumbó los negocios entre los vecinos y finalmente acabó con la cordialidad entre las naciones.

"En condiciones normales, somos el principal proveedor de acero de Colombia. Vamos en este mes de septiembre con las primeras 26.000 toneladas, de las 60.000 que les solemos vender", dijo D'Oliveria citado por el diario El Mundo Economía y Negocios.

Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez y de Colombia, Juan Manuel Santos, se reunieron en agosto para poner fin a la crisis diplomática que separó a las naciones que comparten una porosa frontera de unos 2.000 kilómetros y que en 2008 rompieron record al negociar US$7.000 millones.

Chávez tomó distancia de Bogotá por la firma de un convenio militar entre Colombia y Estados Unidos, que el mandatario socialista consideró una amenaza a su gobierno.

"En vista del acercamiento de las relaciones entre Venezuela y Colombia, tratamos de normalizar el mercado con el país hermano", señaló D'Olivera.

El funcionario agregó que la acería está en proceso de superar una fuerte crisis eléctrica y que espera elevar su nivel de producción para llegar a 2 millones de toneladas de acero líquido este año.

La producción de Sidor se redujo tras su renacionalización en el 2008 y el declive se agravó con una crisis energética que llevó a Chávez a ordenar la paralización de varios hornos de la siderúrgica con el fin de ahorrar unos 300 megavatios (mw), cuando su demanda regular era de 800 mw.

La acería era propiedad del consorcio internacional Ternium, a quien el gobierno compró su mayoría accionaria por unos US$2.000 millones.