Pese a que la entidad bancaria estatal señala que los fondos serán usados para su capitalización, algunos diputados de oposición señalaron que en el informe de la solicitud no se establece claramente en qué serán invertidos estos recursos.

La plenaria de la Asamblea Nacional aprobó un crédito adicional por 400 millones de bolívares fuertes (US$92,9 millones) para el Banco de Desarrollo Económico y Social (Bandes).

El vicepresidente de la Comisión de Finanzas, Simón Escalona, informó que los recursos se destinarán para darle mayor liquidez a la institución financiera a fin de que pueda asumir nuevos compromisos.

La solicitud realizada al Parlamento señala que los fondos serán para capitalizar a la entidad estatal, medida que debió tomarse antes del 30 de junio de este año. Otro de los objetivos es la de "otorgar el apoyo técnico y financiero a las inversiones sociales y productivas establecidas en el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación".

Sin embargo, algunos diputados de oposición señalaron que en el informe de la solicitud realizada por el Ministerio de Planificación y Finanzas, no se establece claramente en qué serán invertidos estos recursos. Sostienen que ante las pérdidas financieras de su filial en Uruguay, prevén que los fondos serán utilizados para capitalizar la entidad ubicada en esa nación austral desde 2005.

Cuestionamientos. "El Bandes Uruguay está casi en la quiebra. Actualmente registra una total incapacidad para cumplir con sus compromisos. ¿No será para esto que necesitan los recursos? El partido Podemos jamás votará por un crédito adicional cuyo destino sea incierto. Es necesario que se realice una auditoría al Bandes y sea presentada a la Asamblea", advirtió el diputado Ricardo Gutiérrez.

Igualmente la diputada por el Frente Humanista, Pastora Medina, solicitó a los miembros de la Comisión de Finanzas que se informe sobre los planes o proyectos que financiarán estos recursos aprobados al Bandes.

Esta apreciación fue reforzada por las declaraciones del parlamentario Hermes García, quien alertó que en el informe que contiene la solicitud "no se tiene la justificación precisa de ese crédito adicional".

De acuerdo al documento presentado en la AN, los recursos permitirán asumir los compromisos actuales y proyectos, según la capacidad de endeudamiento prevista en la Ley de Reforma Parcial del Decreto No. 6.214 con Rango, Valor y Fuerza de la Ley del Bandes. El instrumento legal que rige a esta entidad fue reformado este año para elevar su capacidad de endeudamiento.

A juicio del diputado Ismael García, el otorgamiento de créditos al sector productivo nacional es ínfima en comparación a la cartera de inversiones de títulos valores (deuda), así como de los recursos utilizados para capitalizar al Bandes Uruguay.

Al respecto, el diputado Elvis Amoroso recordó que el Bandes es un banco de segundo piso, "por lo que está muy lejos pedir que se comporte como un banco de primer piso el cual ejecuta todas las operaciones de intermediación financiera".

Los números. Según los estados financieros del Bandes al 30 de junio de 2010, la entidad registra un total de patrimonio de 10.196 millones de bolívares fuertes, un resultado neto (ganancias) de Bs.F. 386 millones, mientras que las disponibilidades de la entidad ascienden a Bs.F. 1.222 millones.

Por otra parte, la cartera de inversiones del Bandes cerró en el primer semestre de 2010 en 24.335 millones de bolívares fuertes y una cartera de créditos por Bs.F. 2.394 millones.

Un resultado que llama la atención es la disminución de los gastos por incobrabilidad de créditos y otras cuentas por cobrar, los cuales pasaron de 19.970.401 bolívares fuertes el 31 de diciembre de 2009 a 806.276 bolívares fuertes el 30 de junio de 2010. Estas cifras evidencian una mejora en la cartera morosa de la institución.

Mientras esto pasa en Venezuela, la filial del Bandes en Uruguay registra un nivel de pérdidas que ha sido una constante desde que esa institución se instaló en el mercado uruguayo en 2005. En lo que va del año acumula un déficit de US$18 millones.

Venezuela aprobó una nueva capitalización por US$6 millones y desde agosto de 2010 se busca reestructurar la plantilla de empleados para darle viabilidad a la institución.