Respecto a la reciente reunión de la OPEP y su decisión de continuar con los actuales niveles de producción, descartando un ajuste de oferta, Nicolás Maduro admitió que su país no logró su objetivo, pero advirtió que "lo lograremos".
Caracas. Venezuela seguirá apostando por un "precio justo" del petróleo en torno a los US$100 por barril, dijo este jueves el presidente Nicolás Maduro, después de que la OPEP decidió no recortar su producción pese a que la amplia oferta ha hundido los precios.
El cártel petrolero, reunido en su sede central de Viena, mantuvo sin cambios su techo de producción, en una victoria para los productores del Golfo Pérsico, pero un revés para Venezuela y otros miembros menos fuertes que se han visto afectados por la caída sostenida en los precios del crudo.
"No hubo consenso para hacer un recorte importante de la oferta petrolera para recuperar los mercados, pero para sobre todo, recuperar los precios", dijo Maduro en un evento militar.
"No lo logramos por ahora, pero lo lograremos y lo seguiremos intentando hasta que los precios petroleros lleguen hasta donde tienen que estar, alrededor de US$100 el barril", destacó el mandatario, quien agregó que los ingresos del país se han desplomado hasta un 40%.
Tras la decisión del grupo, el petróleo Brent cayó más de US$6 hasta tocar los US$71,25 por barril, por la expectativa de una enorme sobreoferta global, antes de recuperarse ligeramente y cerrar en US$72,58.
La exportación petrolera representa el 96% de los ingresos en divisas de la nación, y son el sustento de los ingentes programas gubernamentales que abarcan desde la venta de alimentos subsidiados hasta la construcción de viviendas.
Las autoridades han dicho que están preparadas para el "peor escenario" y que el presupuesto de la nación está calculado con un barril de US$60.
No obstante, el presupuesto sólo cubre una parte del gasto público, mientras el resto de las erogaciones se hacen desde fondos parafiscales manejados por el Ejecutivo y gastos adicionales aprobados por el Legislativo. Estos últimos igualaron el monto del presupuesto anual en noviembre.
"Si hubiera que recortar algo del presupuesto, recortaríamos los gastos suntuarios, recortaríamos nuestros propios sueldos", dijo el presidente, quien descartó una reducción de las inversiones sociales.
"Seguir monitoreando el mercado". El canciller venezolano, Rafael Ramírez, dijo más temprano que el mercado petrolero atraviesa un momento "complejo", pero que la OPEP trabajará por la estabilidad manteniendo el contacto entre sus miembros y con los países productores que no integran el cartel, como México y Rusia.
"Hay que tener mucha calma y seguir monitoreando el mercado de cerca", comentó el también máximo representante de Venezuela ante la OPEP, declarando desde Viena a la televisora Telesur.
Además, volvió a enfilar sus críticas contra el petróleo de esquisto que extrae Estados Unidos y que ha presionado a la baja los precios internacionales del crudo.
"Creemos que esa manera de producir petróleo es insostenible en el tiempo", dijo Ramírez. "Con una baja del precio del petróleo se va a imponer la producción de los países de una forma más eficiente".
La brutal caída de los precios del crudo le llega a Venezuela en momentos en que analistas y gremios aseguran que su economía habría entrado en recesión en medio de una elevada inflación, desabastecimiento de productos básicos y con unos pesados compromisos de deuda en los próximos años.
Para hacer frente a la crisis económica, analistas de Wall Street creen que el gobierno de Maduro debe tomar medidas impopulares pero necesarias, como unificar los tres tipos de cambios oficiales y aumentar la gasolina más barata del mundo.