"Para fin de año se habrán pedido permisos para la construcción de 400 mil metros cuadrados, mientras que en el pasado año se gestionaron permisos para 800 mil metros cuadrados" dijo el presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, Aquiles Martini.
Caracas. En materia de vivienda los promotores inmobiliarios privados han decidido esperar a que en el mercado existan mejores condiciones para iniciar desarrollos.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, Aquiles Martini informó que en 2011 cerrará con una disminución de 50% de las solicitudes de permisos para la construcción de viviendas por parte del sector privado.
"Para fin de año se habrán pedido permisos para la construcción de 400 mil metros cuadrados, mientras que en el pasado año se gestionaron permisos para 800 mil metros cuadrados y en 2009 esta cifra se ubicó en 2 millones de metros cuadrados" dijo el empresario.
Los promotores inmobiliarios consideran que cuando se haya construido lo solicitado hasta la fecha, es poco probable que en 2012 se incremente el número de requerimientos de permisos para acometer proyectos de vivienda. Aquiles Martini destacó que mientras los empresarios privados deben cumplir con trámites complicados para el inicio de los desarrollos, las obras del sector público no siguen el mismo protocolo.
Focos de presión. En la Cámara Inmobiliaria de Venezuela informan que en lo que va de año la actividad ha sido atacada por el gobierno desde diferentes focos de presión.
"Las acciones punitivas comenzaron con el tema de las estafas inmobiliarias que derivó en múltiples intervenciones, después con la Misión Vivienda Venezuela comenzó a restringirse el acceso de los privados a los insumos y agregados para la construcción, la ley contra los desalojos arbitrarios creo mayor inseguridad jurídica y el broche de oro fue la ley de alquileres, que terminó por acabar con el sector inmobiliario" resumió Aquiles Martini.
Para los promotores inmobiliarios este conjunto de acciones no favoreció a los ciudadanos , pues consideran que la balanza se inclinó en contra de todos los venezolanos pues el mercado para el arrendamiento desapareció prácticamente. Citan como evidencia la disminución de la publicación de ofertas de alquiler en los clasificados de los periódicos.
"Se perjudicó a las parejas jóvenes que buscan alquilar para casarse, a las 750 mil personas que dijo el gobierno que viven alquilados, además de los que vivían de esa renta; se perjudicó el patrimonio de los que ahorraron en vivienda para su retiro, hasta se perjudicó el gobierno porque perdió popularidad".
Cifras de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela revelan que actualmente entre el 30 y 35% de la población vive alquilada